--Ha inaugurado en Tarazona la Semana de la Persona Emprendedora en Aragón con la conferencia 'Atrévete a emprender'. --Emprender va a ser una de las pocas opciones que van a existir en el siglo XXI en Europa. Puede serlo cualquiera que se lo proponga y que esté dispuesto a hacerlo. Vivimos en un cambio de era, y de la misma forma que cuando pasamos de la era agraria a la industrial muchas personas se quedaron descolgadas, ahora en España estamos pasando de la era industrial a la de la información. Veníamos de un mundo en el que había nóminas, sueldos, trabajos para toda la vida, había certidumbre y se sabía, más o menos, cómo iban a ser las cosas. Un mundo en el que una persona estudiaba algo y eso le servía para los próximos 20 o 30 años. Ahora, en cambio, vamos hacia un mundo con incertidumbre, donde la innovación es imprescindible y donde surgen muchas oportunidades pero los trabajos están de capa caída. Por eso todos debemos desarrollar una actitud emprendedora porque, aunque los seres humanos siempre trabajamos en organizaciones, hay un cambio de tendencia. Hoy, los conceptos de empresario y empleado se difuminan.

--Es decir, aunque no se sea el dueño de una empresa, se debe tener iniciativa.

--Nuestros padres estudiaban una cosa y se dedicaban a ello toda su vida. Ahora eso va a desaparecer para siempre. Antes el mercado laboral era el juego de la oca, con reglas muy básicas; ahora es el ajedrez: mucho más divertido pero con reglas más complejas. Y si no quieres quedarte fuera de la partida, tienes que aprenderlas.

--Permanecer en un trabajo durante décadas está en la cultura de los españoles, ¿no cree?

--En España tenemos una confusión alucinante, y lo que sucede en la calle es fruto de esa confusión mental. La gente sigue buscando trabajo, cosa que me deja estupefacto. ¿Cómo se puede buscar algo que no existe? ¿No será más lógico crearte tú tu puesto de trabajo? Busca un problema que tenga la sociedad y encuentra la solución. Eso es actitud emprendedora. Lo otro es buscar un trabajo y que alguien se haga cargo de tus miedos y te pague una cantidad fija todos los meses. No tengo nada en contra de eso, pero buscar solo eso me parece un poco pobre...

--¿Piensa que todos podemos ser emprendedores?

--Es una capacidad que se aprende, no es innata. Hay que buscar algo que te apasione y ponerlo al servicio de la sociedad. Antes o después, si encuentras un modelo de negocio, te irá bien. Hay personas que están más dormidas y otras menos. Me gusta mucho la frase Piensa más un hambriento que diez abogados juntos porque es verdad. Cuando se te acabe el paro y ya no tengas apoyo familiar, espabilarás como lo hemos hecho todos.

--Afirma que su pasión es conseguir que las personas encuentren su misión personal. ¿Todos tenemos una?

--Sí. A todos nos ha premiado la vida con un talento o con un don, y para mí el verdadero cambio social se producirá cuando cada persona utilice ese talento o ese don en beneficio de los demás, y además vivirá feliz. El tercer paso es rentabilizarlo, que alguien pague por lo que tú haces.

--Parece fácil cuando lo dice...

--Es complicado. Trabajo muchísimas horas, yo y todos los empresarios a los que conozco. Pero se puede conseguir y cada día hay más casos que lo demuestran.

--¿Por ejemplo?

--Solo hay que mirar alrededor. En los últimos años se han creado más grandes fortunas en el último siglo. Eso significa que, en un mundo que va muy deprisa, aquellos que dan con la solución a problemas nuevos se enriquecen antes. Afortunadamente, hoy se pueden montar negocios con muy poco, lo importante es el talento.

--Ha escrito 'Vivir sin miedo'. ¿Eso cómo se hace?

--En el mundo hay dos energías básicas: el amor y el miedo. Cada decisión que tomamos cada día está motivada por una de las dos. El secreto es hacerlo desde el amor.

--¿Cómo surgió el juego de mesa 'Sorprendedores'?

--Lo creamos entre un compañero, Rubén Chacón, y yo. Enseña las actitudes para emprender desde los valores y con economía real. El Monopoly va de hacerte rico con la especulación inmobiliaria, lo que nos parece un modelo absurdo y que deja mucho que desear. En 'Sorprendedores', el ganador debe tener dinero pero también karma.

--¿Y en qué está ahora?

--Tengo varios proyectos. Cuido de mis libros y dirijo el máster para emprendedores del Instituto Pensamiento Positivo, entre otras muchas cosas. Arranca el mes que viene. También hago un programa, 'Pensamiento Positivo', los sábados en ABC Punto Radio.

--Otra de sus obras es 'Vivir sin jefes'. Es una figura demonizada.

--Porque siempre hay que señalar fuera, ya sea al jefe, al alcalde, al presidente del Gobierno... Si preguntas en la calle quién tiene la culpa de la crisis, nadie dirá que todos la tenemos un poquito.