Los sindicatos solicitaron ayer a los responsables de las empresas que conforman el parque de proveedores de General Motors (GM) España que no aprovechen "en su propio beneficio" la reestructuración de la multinacional automovilística, y que conlleva la supresión de 618 empleos en la planta de Figueruelas. En este sentido, pidieron a las auxiliares que no utilicen la situación actual para plantear medidas de recorte, que no tienen que ver con los efectos del ajuste de la planta zaragozana.

"No es casual que sea, precisamente ahora, cuando desde la asociación de fabricantes de automóviles (Anfac) se sale a la palestra para pedir mayor flexibilidad para el sector", señaló la Federación de Industrias Afines (FIA) de UGT-Aragón en un comunicado. El viernes se reunió la mesa de auxiliares del automóvil de esta federación, que aglutina al 30% del parque de proveedores.

En todo caso, y refiriéndose al efecto que puede tener la reestructuración de Figueruelas, la federación sindical incidió en que no tenía "fundamento" hablar de repercusiones negativas sobre sus auxiliares "y, sobre todo, en los términos en los que se viene haciendo, anticipando despidos y regulaciones de empleo. Tal cosa supone una manipulación de los hechos y sólo contribuye a generar un clima de alarma social absolutamente injustificada hoy por hoy". Así, apuntaron que la situación de GM España es de reajuste de plantilla, "no así de producción, que se mantiene prácticamente igual, ya que la reducción anunciada corresponde a los días de paro que se han producido en los últimos años".

Con todo, señalaron que se está contribuyendo a crear un ambiente propicio para que esas situaciones se conviertan en realidad, "cuando las empresas decidan aprovechar la coyuntura en su propio beneficio".

Por el contrario, desde la Federación de Industrias de Textil, Químicas y Afines (Fiteqa) de CCOO en Aragón se apuntó que el ajuste de la multinacional se va a notar en las auxiliares. "Si habláramos sólo de GM España, quizás el efecto no fuera tan grande, pero el problema es que todo el sector del automóvil está en una situación similar", comentó el secretario general de Fiteqa, José Manuel Curros. Así, desde FIA-UGT se recomendó a las empresas que diversificaaran su cartera de clientes "como una forma más de asegurar su futuro y contribuir a la estabilidad en el empleo". Curros también valoró dicha medida, pero recordó que la mayoría de clientes son firmas automovilísticas "y ya sabemos cómo está el mercado".