El vicepresidente y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, se comprometió ayer ante la Comisión de Economía del Congreso de los Diputados a abordar la reforma del IRPF prevista en el programa electoral del PSOE, que incluye una rebaja de los tipos marginales máximos, una elevación del mínimo exento y un "tratamiento equivalente" entre rentas del capital y del trabajo.

El compromiso de cumplir el programa electoral no debería ser noticia, de no ser porque las ambiciosas promesas socialistas deben encajarse con el objetivo de estabilidad presupuestaria. Los grupos de la oposición mostraron escepticismo frente a este difícil encaje del programa socialista.