Solo el 1,08% de los autónomos aragoneses se dio de baja por enfermedad (Incapacidad temporal / IT) en el 2017 frente al 1,98% de los trabajadores asalariados, lo que significa que los autónomos que no acuden al trabajo son casi la mitad que los asalariados. Estos son los datos que se desprenden de un informe elaborado por la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos, ATA.

Debido a esta diferencia, la incidencia media mensual por cada mil trabajadores sigue la misma línea y en el caso de los trabajadores autónomos es del 10,71, es decir, sólo diez de cada mil trabajadores autónomos se dan de baja por enfermedad cada mes. Si se compara con los asalariados, éstos se dan de baja dos veces más, hasta un 23,78 (incidencia mensual de uno por cada mil trabajadores).

Sin embargo, el informe también incide en el número de días que permanecen de baja en la comunidad. En este caso se da la situación contraria y los autónomos están de media 78 días frente a los 37 de los asalariados.

Estos datos son acordes con la media nacional donde se dieron de baja el 0,96% de autónomos en comparación al 1,95% de los asalariados con una duración media de 92 días frente a 39, es decir, el triple de días y con una incidencia media mensual de 9,22 y 22,77 respectivamente. El informe concluye que la media de autónomos que mensualmente han solicitado la baja por incapacidad temporal durante el año 2017 es de 29.673 frente a los 355.784 trabajadores asalariados.

Para el presidente de la Federación de Trabajadores Autónomos, Lorenzo Amor, estas cifras tienen una interpretación clara: «Los autónomos se dan mucho menos que los asalariados de baja por enfermedad, pero sus bajas son mucho más largas ya que un autónomo no solicita una baja por un constipado. Un autónomo siempre está pendiente de su negocio y sólo cuando la enfermedad es lo suficientemente complicada y larga como para impedirle atenderlo solicita esa baja por incapacidad temporal». Además, recomendó a los autónomos que «adecúen en cada periodo su base de cotización a lo máximo que puedan ya que cuando estén de baja, va a ser para largo tiempo y necesitan poder recibir lo máximo posible». También añadió que «por eso, desde ATA pedimos que los autónomos estén exentos de pagar la cuota a la Seguridad Social a partir del día 30 de la baja. Porque son bajas largas en las que tienen que seguir pagando su cuota a la Seguridad Social y en ocasiones esto se convierte en un verdadero problema».