Piensa diferente, aplica tecnología. Este lema, de uno de los expositores asistentes esta semana a la Feria de Zaragoza, resume las intenciones de la agroindustria por renovarse y situarse a la vanguardia mundial. Este sector estratégico en la economía aragonesa afronta un año importante para recuperar su dinamismo inversor, después de que las entidades financieras estén facilitando de nuevo el acceso al crédito. En ello coinciden los expertos y las compañías que participan en cinco salones dedicados a la maquinaria para la producción de vino --Enomaq y Tecnovid--, aceite --Oleomaq y Oleotec--, y el cultivo de frutas y hortalizas Fruyver, que hasta el viernes reúnen en la capital aragonesa a 1.096 empresas, la mitad extranjeras, y espera atraer a 25.000 visitantes profesionales.

Estas buenas expectativas se vislumbran, por ejemplo, en empresas como Agromet. Desde la firma ejeana de maquinaria de preparación del suelo para la viticultura vislumbran un "buen año", aunque reconocen que "todavía es necesario mejorar el acceso a la financiación" en el caso de las empresas. Al agricultor, en cambio, la banca lo busca, sobre todo la extranjera, apunta Alfonso Tejada, director comercial de Agromet. "Hace diez años las entidades financieras escapaban del sector agrario porque generaba poco valor añadido y preferían otros como la construcción. Ahora, sin embargo, somos los mejores: nosotros estamos en el mismo sitio de siempre pero los demás han caído", explica.

Otra firma que siempre asiste a estas ferias sinérgicas es la italiana Pieralisi. Líder en el sector del aceite, en esta edición presenta un sistema completo para la industria vinícola, que quiere dar a conocer a las bodegas en Zaragoza. Y, consciente de la situación, la firma quiere facilitar sus compras a los clientes. "Tenemos dos líneas de financiación: una de leasing y otra con 0% de interés durante dos campañas", explicó Stefano Spe, responsable de márketing de Pieralisi.

"EXCEPCIONAL"

El presidente del comité organizador, Enrique Echepare, destacó la fuerte presencia de expositores internacionales. "La feria está excepcional, como nunca", dijo. En su opinión, y según su experiencia de más de 30 años en el sector vitivinícola, "hay demanda por parte de las empresas" y, aunque estas muestras sirven sobre todo para hacer contactos, "se ha abierto el grifo de la financiación y el dinero está barato, por lo que veo una situación muy positiva y favorable para los negocios".

Sin embargo, entre los puntos débiles del sector, Echepare lamentó que el vino español se exporte a un precio tan bajo. "No tenemos una marca España unificada y cada uno va por su lado. Francia, en cambio, tiene vinos de la misma calidad pero cuestan dos veces y media más caros. Nos falta posicionamiento y levantar el precio, porque nuestros caldos son magníficos", elogió. Como principales mercados, Echepare resaltó Estados Unidos, donde "las ventas han aumentado mucho" porque "allí les gusta lo bueno y no tienen clichés a la hora de dar más valor a los franceses o a los italianos", argumentó. Asimismo, auguró que China "va a tirar mucho".