El director financiero de Telefónica, Ángel Vila, dijo ayer en un conferencia a analistas que la compañía estudia distintas oportunidades de crecimiento en México. "Hay varias opciones estratégicas abiertas en México", según explicó, pero a la vez aclaró que de momento no hay ningún acuerdo cerrado.
Telefónica logró un beneficio neto en el primer semestre del año de 1.903 millones de euros, lo que supone un 7,5% menos que en el mismo período de 2013. La compañía lo achaca a la evolución de los tipos de cambio y algunas modificaciones en el perímetro de consolidación por las desinversiones realizadas.
El resultado operativo antes de amortizaciones e impuestos fue de 8.055 millones de euros, el 14,5% menos en tasa interanual. Los ingresos de la operadora en el semestre ascendieron a 24.957 millones, el 12,6% menos.
Los ingresos de Telefónica en España cayeron un 8,6 % en el primer semestre del año, hasta los 5.992 millones de euros, aunque la compañía apunta ya a un cambio en la dinámica del negocio en el país "confirmando su gradual recuperación". La operadora vincula esta caída en la base de clientes a la desactivación de 569.000 líneas inactivas de M2M (líneas de telefonía móvil asociadas a máquinas).
Por otra parte, el consejo de administración de la compañía aprobó la sustitución del blindaje que figuraba en el contrato del presidente de la compañía, César Alierta, por una aportación única de 35,5 millones al plan de previsión social para directivos, informó la compañía.
Esta decisión se enmarca en la política de la compañía de ir reduciendo los blindajes que mantenían los principales directivos. La aportación extraordinaria se cifra en 35,5 millones de euros, es igual a la suma de todas las obligaciones contractuales que mantiene la compañía con su presidente.
