La Seguridad Social realizará 64.000 intervenciones más de las previstas antes de finalizar el año en toda España para verificar la pertinencia de las bajas por incapacidad temporal diagnosticadas. Así lo ha publicitado el Ministerio de Trabajo en un comunicado, en el que ha concretado que las actuaciones de los inspectores del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) se centrarán en aquellas bajas de menos de 345 días de duración.

La medida supone un incremento del 25% de las actuaciones sobre las previstas inicialmente en el plan de control ordinario y persigue "reforzar la eficiencia del sistema" y discernir "cuando el ciudadano percibe las prestaciones que le corresponden y no percibe aquellas que no le corresponden", según reza el comunicado.

Para ello, los 267 inspectores médicos que se han postulado voluntariamente para participar en el plan van a ampliar cuatros horas a la semana su jornada laboral. El coste total del programa asciende a 312.142,56 euros, y el Ministerio de Trabajo ha cifrado el ahorro potencial en prestaciones en más de 33 millones de euros.