El consejero aragonés de Medio Ambiente, Modesto Lobón, valoró ayer la decisión de la Unión Europea (UE) de que los Estados miembros puedan restringir o prohibir el cultivo de organismos transgénicos en su territorio porque se esclarece el marco jurídico, que tenía bloqueada la situación hasta ahora. Los países de la UE cerraron en Luxemburgo, en un Consejo de Ministros de Medio Ambiente, un acuerdo político sobre la revisión de la legislación comunitaria sobre transgénicos, que pretende facilitar la autorización de estos productos a nivel europeo, al permitir legalmente a los países prohibir individualmente su cultivo.
Lobón, actual titular de la representación autonómica directa en la Delegación Española ante dicho organismo, explicó que "la seguridad está garantizada por Europa y cada Estado puede hacer lo que le parezca más oportuno". En este sentido, aseguró que las comunidades están de acuerdo con el Estado en que "no se puede estar de espaldas a la modernidad" y, sobre todo, que "esta medida puede mejorar sustancialmente" los cultivos y que "es importante para la ganadería y, especialmente, para Aragón".
