La propuesta de prohibir la venta y matriculación de vehículos de combustión en el 2040, que recoge el borrador de la ley de cambio climático y transición ecológica, pone "en serio peligro la estabilidad de los centros de trabajo y los miles de empleos" del sector del automóvil, según UGT FICA.

En una nota valora así la Federación de Industria, Construcción y Agro de UGT el citado borrador de la futura normativa, que también prevé prohibir en el 2050 la circulación de todos los turismos y comerciales que emitan C02, por lo que solo quedarían excluidos los eléctricos y de pila de combustible.

La federación ha lamentado que esos planteamientos "desproporcionados y erróneos" se hayan conocido este martes a través de la prensa y sin que el Gobierno haya evaluado previamente el impacto de esas medidas y sin adoptar otras que puedan paliar los efectos de las primeras.

Ese tipo de anuncios "no ayudan precisamente a consolidar la industria automovilística, sino más bien al contrario", ha advertido el sindicato.

Vehículos verdes

Para UGT FICA es una "temeridad que hace flaco servicio" a la industria del automóvil poner "fecha de caducidad" a la matriculación de vehículos diésel, gasolina e híbridos sin abrir antes una mesa negociación en la que se diagnostiquen las medidas necesarias para "minimizar el impacto negativo" que tendrá esa prohibición y "pasando por encima" de acuerdos adoptados a nivel europeo.

El planteamiento que le hace UGT al Gobierno es que la transición hacia "vehículos verdes" en las fábricas españolas sea "progresiva, ordenada y justa", y que tenga en cuenta todas las variables.

Esto implica un pacto de estado por la industria, consensuado con los agentes sociales, en el que se recojan inversiones para dar estabilidad y futuro al sector automovilístico, "dejando de un lado declaraciones que en nada benefician al empleo".