Ryanair se ahorra unos 20 millones al año en Seguridad Social gracias a los contratos irlandeses de su tripulación, tanto de tripulantes de cabina (TCPs) como de pilotos, que evitan a la empresa tener que pagar algunos de sus impuestos aquí, entre los que también se encuentra el impuesto de sociedades, que paga mayoritariamente fuera de España, según denunció ayer el sindicato USO.

«Tomando como base el sueldo medio de 20.000 euros brutos que perciben (los TCPs) en España, y calculando unas retenciones conjuntas de un 20 % en nómina, nos sale una estimación, a la baja de más de 7 millones», explican desde USO, lo que sumado a lo que tampoco pagan de los pilotos que, según USO, ganan una media de 5.000 euros por unos 800 pilotos, supone 12 millones más de ahorro a la compañía.

Unas cifras que se deben a la fórmula de la compañía de contratar a la mayoría de su plantilla, un 75 % de los 1.800 tripulantes de cabina, mediante contratos externalizados irlandeses, a través de las agencias irlandesas Worforce y Crewlin, es decir, cotizan en Irlanda, aunque trabajen y vivan en España. Este es el principal reclamo de los tripulantes y el motivo de la huelga celebrada los días 25 y 26 de julio y tras la cual las condiciones siguen sin cambiar.

MÁS PASAJEROS / A pesar de las huelgas que le obligaron a cancelar más de mil vuelos, Ryanair aumentó el número de pasajeros en el mes de julio un 4% respecto al mismo mes del año 2017, hasta alcanzar 13,1 millones. «Lamentablemente, casi 200.000 clientes de Ryanair han sufrido la cancelación de sus vuelos en julio debido a las repetidas huelgas de los controladores aéreos en Reino Unido, Alemania y Francia, el mal tiempo y las innecesarias huelgas de pilotos y tripulación de cabina», sostiene en un comunicado el director de Marketing de Ryanair, Kenny Jacobs. La aerolínea irlandesa, además, ha mantenido el mismo factor de ocupación que hace un año.