La ministra de Trabajo, Magdalena Valerio, aseguró ayer que uno de cada cuatro autónomos (unos 800.000 trabajadores de 3,2 millones) están «sobrecotizando», es decir, contribuyendo a la Seguridad Social por encima de sus rendimientos netos. Por ello, se comprometió a abordar una reforma del Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA), aunque habrá que esperar a las conclusiones que salgan de la subcomisión parlamentaria del RETA y ver qué planteamientos se hacen en la mesa del diálogo social con los sindicatos para plantear una propuesta «consensuada».

En declaraciones posteriores a la reunión que mantuvo con los responsables de las asociaciones de autónomos ATA y UPTA, Lorenzo Amor y Eduardo Abad, la ministra valoró la propuesta conjunta de las organizaciones para avanzar en la cotización por ingresos reales de los autónomos. Ambas asociaciones habían acordado un sistema basado en varios tramos de cotización en función de los ingresos reales de los autónomos, con una situación similar a la tarifa plana de cotización para aquellos que menos ingresen, así como una bonificación al 100% de la cuota para las bajas por incapacidad temporal. En lo que respecta a este último punto, la ministra reconoció que ve «muy difícil» alcanzar el consenso con las organizaciones representativas y los partidos en el Congreso, aunque valoró que la apuesta conjunta «facilita mucho la tarea» al Gobierno.

Valerio también anunció la puesta en marcha de un Consejo de Trabajo Autónomo para los más de tres millones de autónomos españoles a petición de ATA y UPTA, el cual definió como un «compromiso legislativo que debería estar cubierto para octubre». Asimismo, reiteró su compromiso por crear por primera vez en España un foro de diálogo «permanente» con las asociaciones de autónomos.

UNA TARIFA PLANA

Además, Valerio adelantó la creación de una Mesa Técnica de Trabajo, donde se tratarán temas como la necesidad de adecuar las cotizaciones de los trabajadores autónomos a sus ingresos reales, teniendo en cuenta que los que tengan rendimientos por debajo del salario mínimo interprofesional deberán tener un tratamiento especial, «tipo tarifa plana», detalló.

En relación a los «falsos autónomos» y los falsos cooperativistas, la ministra resaltó que existe un «abuso» en la utilización de esa figura. Así, remarcó que la Inspección de Trabajo luchará contra la precariedad laboral, la temporalidad abusiva y, en concreto, el uso que se da a la figura del «falso autónomo».

El presidente de ATA, Lorenzo Amor, aseguró que su organización valora «muy positivamente» el diálogo «constante y fluido» con la Administración y la puesta en marcha de las mesas técnicas. Asimismo, destacó que los autónomos necesitan «cuanto antes» un sistema de Seguridad Social «solidario, pero también justo». Su homólogo en UPTA, Eduardo Abad, señaló que «es un buen día para los autónomos», ya que se ha recuperado el diálogo entre la Administración y las organizaciones. Así, aseguró que ambos han encontrado un documento «común» que establece una ruta hacia un nuevo RETA.

«Tenemos la obligación de equilibrar el sistema de aquí al año 2022 o 2023, para que cuando llegue el impacto que van a generar las jubilaciones del baby boom tengamos un sistema lo más saneado que sea posible», afirmó la ministra Valerio en su primera comparecencia en la comisión del Pacto de Toledo. La contribución a tal aspecto desde el colectivo de autónomos es, estadísticamente, negativa. La Seguridad Social, según la última memoria, cerró junio con una previsión de ingresar el 34,9% menos de un trabajador autónomo que de uno del régimen general. Números que se reflejan en la cuantía de las pensiones, más baja en el caso de los autónomos.