Las ventas de ciclomotores en el mercado español han experimentado un incremento de más del 14% desde que finalizara la crisis económica, en el 2013, gracias al auge de las empresas de reparto de paquetes y de comida, según datos de la Asociación Nacional de Empresas del Sector de Dos Ruedas (Anesdor). Al cierre del 2013 se matricularon en España un total de 15.082 ciclomotores, lo que representó una bajada del 18,9% respecto al año anterior, mientras que las entregas de este tipo de modelos en el 2016 se situaron en 17.230 unidades, el 7,7% más que el año anterior y el 14,2% más respecto al 2013.

Las previsiones de Anesdor para el cierre del ejercicio actual contemplan que el mercado de ciclomotores en España alcance un volumen de 20.100 unidades, lo que supondría una subida de cerca del 17% respecto al 2016 y del 33% frente al 2013. Entre enero y julio se vendieron en nuestro país 11.696 ciclomotores, el 22,7% más.

MOVILIDAD

Ante estos datos, el secretario general de la organización, José María Riaño, explicó que, a diferencia de las motocicletas, el mercado de los ciclomotores no se ha visto afectado en el último año por la normativa europea de emisiones Euro 4, puesto que para este segmento entrará en vigor en el el 2018.

«El ciclomotor reaparece como un gran elemento de movilidad, convirtiéndose en la solución perfecta para las empresas de delivery (entrega urgente)», explicó Riaño. Prueba de ello, apuntó, es que el impulso de este mercado se produce fundamentalmente por el fuerte crecimiento de los canales de empresas y rent a car, que aumentan el 26,6% y el 82%, respectivamente, en lo que llevamos del 2017.

Así, señaló que las empresas eligen este tipo de vehículos por las ventajas que presentan en la movilidad frente a otros, puesto que reducen el tiempo empleado en los desplazamientos entre el 50% y el 70%, se filtran entre el tráfico sorteando los atascos y permiten los desplazamientos «puerta a puerta».