Volkswagen invertirá 11.000 millones de euros en movilidad eléctrica, conducción autónoma y nuevos servicios de movilidad y digitalización hasta 2023. Del total, según ha confirmado el director de operaciones de la compañía, Ralf Brandstätter, 9.000 millones se destinarán a la ambiciosa ofensiva eléctrica de la firma alemana. Como grupo, el Grupo Volkswagen invertirá más de 44.000 millones en la electrificación y nuevos servicios de movilidad. La electrificación en Volkswagen corre de la mano de Thomas Ulbrich desde el pasado enero.

La marca lanzará el I.D. Neo, su primer vehículo eléctrico más allá del e-Golf y el e-UP, el próximo año y le seguirán más modelos de la familia I.D., creada por Volkswagen específicamente para coches eléctricos. Con todo, la marca espera producir creca de un millón de vehículos electrificados, contando híbridos y eléctricos en 2025, cifra que aumenta hasta tres millones en el conjunto del grupo. Para ello, Volkswagen ya está adaptando su planta alemana de Zwickau para posibilitar la producción de hasta 330.000 eléctricos al año. El mes pasado se conocía que Zwickau también será la casa del Seat Born, el primer Seat 100% eléctrico, que costará unos 25.000 euros. El nombre es provisional.

LOS PASOS A SEGUIR

Con la adaptación de Zwickau en marcha, Volkswagen también ha anunciado la transformación de las plantas de Emden, que producirá eléctricos a partir de 2022, y Hannover, que producirá el I.D. Buzz el mismo año. Como adelantó este miércoles Motor Zeta, la firma alemana espera construir otra fábrica en Estados Unidos, que se sumaría a la de Chattanooga (Tennessee), que también producirá eléctricos en 2022, y podría usar la capacidad productiva de Ford en el país americano para fabricar sus vehículos a cambio de compartir plataformas y tecnología. El Grupo Volkswagen prevé ofrecer hasta 50 modelos totalmente eléctricos en 2025 entre sus 12 marcas, de los cuales 27 deberían haberse lanzado para 2022. Para ello, la firma alemana creará un segundo centro de movilidad eléctrica en la Baja Sajonia (Alemania).

En China, el principal mercado para vehículos eléctricos, Volkswagen fortalecerá sus alianzas para producir también coches eléctricos en el país. Así, la marca ya ha empezado a contruir una fábrica en Anting, Shanghái, donde se producirán eléctricos basados en la plataforma MEB bajo el paraguas de la alianza etratégica de la firma alemana con SAIC Motor, Saic Volkswagen. Esta planta debería empezar fabricando hasta 300.000 vehículos al año en 2020, unidades que se sumarían a las que Saic Volkswagen espera producir en Foshan, que en también acogerá la producción de eléctricos en 2020.

En cuanto a nuevo servicios de movilidad y digitalización, Volkswagen está desarrollando con Microsoft su nube, Volkswagen Automotive Cloud, que sentará las bases para ofrecer una gama de servicios digitales cada vez más grande con vehículos conectados. Como ha incidido Brandstätter, el objetivo es crear "el mayor ecosistema automotriz del mundo".

PLANES DE AHORRO

Para financiar los 11.000 millones que quiere invertir la marca, Arno Antiltz, responsable de finanzas, ha anunciado un conjunto de medidas para mejorar la rentabilidad de la firma y así asegurar su capacidad para llevar a cabo la inversión. Estas medidas incluirán la cuota de producción de vehículos basados en la plataforma MQB, que pasará del 60% actual hasta el 80% en 2020, el aumento de la eficiencia de sus plantas en un 30% para 2025, la reducción de su cartera de producto para simplificar los procesos de producción y la optimización de los costes de materiales.

Antiltz ha estimado que Volkswagen presentará unos ahorros de costes de más de 2.200 millones de euros para 2019 y prevé 3.000 millones en 2020. Con todas las medidas, la marca espera alcanzar el objetivo de aumentar el retorno operativo de un 6% sobre las ventas de la compañía en 2022, tres años antes de la fecha inicialmente planeada, 2025.