El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, se reunirá con el presidente del BBVA, Francisco González, probablemente el próximo 17 de setiembre, fecha en la que el político y el banquero coincidirán en la clausura de un seminario, que patrocina el banco vasco y organiza ABC . Zapatero ha confirmado que cerrará el encuentro. La convocatoria podría aprovecharse para abordar asuntos de mayor calado, entre los que destaca la evolución de las empresas privatizadas en las que el banco tiene participaciones y el relevo en las cúpulas directivas.

Hasta ahora, el presidente del Gobierno y el de la entidad bancaria se han encontrado tres veces en diversos actos públicos, pero fue en julio, durante el encuentro organizado por la Fundación Carolina, cuando Francisco González lanzó al presidente del Gobierno: "A ver cuando quedamos". Utilizó el tono absolutamente coloquial para estos casos.

ACTITUD DE GONZALEZ La actitud de González con respecto al Gobierno de Zapatero es un elemento clave, una vez que los socialistas han decidido poner en marcha el relevo, seguro y pausado, al frente de las antiguas empresas públicas. El BBVA y La Caixa forman el "núcleo duro" de accionistas de Telefónica y Repsol. Sin la colaboración de ambas entidades financieras, será difícil abordar los cambios en la presidencia de las privatizadas.

MANTENER LA SINTONIA "No existe ningún banco que se enfrente al Gobierno de su país, si lo que este expone es sensato --explican fuentes financieras, expertas en la cultura directiva del BBVA--. González, ante todo, es un pragmático, que piensa en los intereses del banco y de sus accionistas. Si el Gobierno plantea un relevo sensato y profesional, puede contar con el BBVA" explican las mismas fuentes.

El presidente del banco vasco, que llegó al cargo a partir de la privatización de Argentaria por el Gobierno de Aznar, y tras fusionarse el banco público con el BBV, es amigo personal de alguno de los presidentes de las empresas privatizadas, como es el caso de Manuel Pizarro (Endesa) y de César Alierta (Telefónica). El caso del presidente de Repsol, Alfonso Cortina, es distinto. Cortina era consejero del BBVA cuando estalló el escándalo de las cuentas secretas de Jersey y González le pidió que abandonará el consejo, como a los otros consejeros implicados.

CITAS CON SOLBES González se ha entrevistado ya dos veces son el vicepresidente y ministro de Economía, Pedro Solbes, "pero han sido encuentros de cortesía, donde el presidente del BBVA se limitó a ofrecer una colaboración correcta y puso a disposición de Economía los datos y documentos del Servicio de Estudios. Esas cosas que siempre se hacen" subrayan fuentes próximas al banco.

Mientras que las relaciones de González con Solbes son correctas y amables, el presidente del banco no olvida que el principal asesor económico de Zapatero en La Moncloa es Miguel Sebastián, exdirector del servicio de estudios del banco. La relación entre González y Sebastián salió malparada por las filtraciones y el uso que Sebastián hizo del citado servicio de estudios.

CORTINA, EL PRIMERO El presidente de Repsol YPF, Alfonso Cortina, tiene el mayor número de papeletas para dejar antes la presidencia de una empresa privatizada. "¿Alguien se imagina la química entre Montilla (ministro de Industria) y Cortina?" se preguntaba a principios de este mes un alto cargo del Gobierno socialista.

El empresario y financiero no cuenta con el apoyo pleno de los accionistas de referencia de su empresa. Sus relaciones con La Caixa quedaron tocadas tras su oposición a la OPA de Gas Natural sobre Iberdrola, mientras que sus contactos con el presidente del BBVA salieron malparados tras ser cesado como consejero del banco durante el escándalo de las cuentas secretas de Jersey".