La candidata de Chunta Aragonesista (CHA) en la lista electoral de Primavera Europea, Ángela Labordeta, llegó anoche en torno a las 21.30 horas al centro musical Las Armas, en el barrio de San Pablo. Allí ya la esperaban varios compañeros de partido y también los simpatizantes de la coalición, ataviados con las camisetas verdes.

Tras dos semanas de campaña, Labordeta hizo dos balances: el político y el personal. "Han sido días muy intensos, donde hemos tratado de llegar a la gente y claro que se llega cansado al tramo final, pero creo que hemos cumplido con el objetivo de transmitir nuestros principios. El ciudadano es lo más importante y por eso hay que recuperar la cultura, la sanidad, la educación. En resumen, hay que recuperar la dignidad de las personas", apuntó.

En el plano personal, la candidata dijo que la experiencia "ha sido muy bonita" y se mostró "contenta" con su actuación. "Nunca pretendí ser la mejor candidata, sino no engañarme a mi misma ni a la gente", remarcó. Respecto a los resultados de mañana, Labordeta apuntó que "derrotar al bipartidismo es muy difícil", pero señaló que "la sociedad está más receptiva a votar a partidos más pequeños frente al desastre que han creado los grandes, así que es un paso importante".

LA FIGURA DE SU PADRE Labordeta insistió en que "la solución no está en quedarse en casa" y por eso pidió "que la gente salga a votar masivamente, porque tenemos la obligación de acabar con todos los retrocesos. Pido el voto para Primavera Europea porque, honestamente, creo que se pueden cambiar las cosas", matizó.

Por último, la aragonesa remarcó que la figura de su padre le ha acompañado durante toda la campaña. "No ha habido un lugar donde la gente no se me haya acercado para decirme que en algún momento coincidieron con mi padre, o cenaron con él o que lo vieron en sus conciertos. Y eso ha sido emotivo. Me presenté a estas elecciones porque lo que yo quiero de verdad es a Aragón y así se lo he transmitido a los ciudadanos", señaló.