Los diputados del grupo de Cs en el Parlament, encabezados por su líder y cabeza de lista por Barcelona a las elecciones del 28-A, Inés Arrimadas, recibieron ayer insultos de decenas de personas mientras paseaban y luego atendían a los medios en la plaza Major de Vic (Barcelona). Arrimadas y otros parlamentarios del grupo naranja visitaron ayer la ciudad de Vic, tradicional feudo electoral de las fuerzas soberanistas. Durante su paseo por las calles de la localidad, la nutrida comitiva de diputados -acompañados por los periodistas que los seguían- apenas escuchó algún insulto desde lejos, pero una vez en la plaza Mayor aproximadamente medio centenar de personas se ha congregado a su alrededor y les han proferido insultos. «Mala puta», «Puta España», «Fuera» o «Visca Terra Lliure» son algunas de las expresiones que profirieron a los diputados de Cs.

«Esto se va a acabar. Ya está bien de tener a fascistas que nos atacan, esto se va a acabar en cuanto Albert Rivera sea presidente». Según Arrimadas, «este país no se merece estar dirigido por aquellos fascistas que agreden e insultan y que quieren echar de determinados pueblos a los constitucionalistas». «Vamos a hacer lo que el Gobierno de Sánchez no hace: defender la libertad hasta en el último rincón de España», prosiguió.

SIN CORDONES SANITARIOS

El candidato de Cs a la Presidencia del Gobierno, Albert Rivera, aseguró ayer en una entrevista a El Confidencial que él no pone «cordones sanitarios» a ninguna fuerza política, refiriéndose a Vox, y aseguró que lo que quiere es «construir» un Gobierno Cs-PP.

«Yo no hablo de vetos, hablo de proyecto, e insisto, hay que esperar a los resultados», afirmó sobre posibles pactos.