Goebbels, Goering, Eichmann, Bormann o Speer también participarán en las elecciones europeas del próximo 26 de mayo. No son los miembros de la cúpula nazi resucitados sino ciudadanos alemanes que comparten apellidos con ellos y que han sido seleccionados por el partido satírico Die Partei para formar parte de sus listas.

Aunque ese gesto podría ser entendido como una crítica irónica a la normalización de las posiciones más radicales en Alemania la formación encabezada por el humorista Martin Sonneborn ha remarcado que quiere poner el dedo en la llaga. Con su nueva performance buscan claramente provocar a los votantes «confusos y dementes» de partidos conservadores como el de Angela Merkel y desorientar a los simpatizantes de la ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD).

De esta manera, el país verá cómo el apellido del jefe de la propaganda nazi o del responsable del asesinato de millones de judíos estará en las papeletas para los comicios europeos. «Hemos dejado a Claus von Stauffenberg fuera de la lista porque es considerado un traidor por sectores de AfD», bromeó Sonneborn, en referencia al capitán del ejército nazi que conspiró contra Hitler.

Hace años que se debate cómo encarar las propuestas y juegos provocativos de los partidos satíricos, un tema que aún divide y confunde a muchos electores. Al bipartidismo alemán esas bromas no parecen gustarle nada. Así, la Unión Demócrata Cristiana (CDU) de Merkel, sus socios bávaros (CSU) y los socialdemócratas (SPD), todos miembros del Gobierno actual, han intentado sin éxito modificar la ley europea para establecer entre el 2% y el 5% el mínimo de votos para obtener representación en la Eurocámara. Eso podría darse para los comicios del 2024.

Como era de esperar, esa nueva provocación de Die Partei ha causado indignación y malestar entre partidos políticos y grupos judíos de Alemania. «Las elecciones no son divertidas, sino un derecho», ha lamentado Karin Prien, portavoz del Foro Judío de la CDU. «Afirmar que se quiere luchar contra los populistas de derecha de esa manera es ingenuo, mentiroso o, al menos, poco inteligente».

Sonneborn es periodista y politólogo de formación y entre el 2000 y el 2005 fue el máximo responsable de la revista satírica Titanic, algo así como el Jueves alemán. Por sorpresa, el año 2014 Die Partei obtuvo hasta 174.804 votos y Sonneborn se convirtió así en su primer eurodiputado.

Su práctica de alternar síes y noes en las votaciones, que se justifica por su falta de influencia en el debate, es vista por sus colegas como algo irresponsable.

Sin embargo, en el 2017 su voto contribuyó a la aprobación de una medida para reforzar la privacidad de los datos en internet. El número dos de la lista será el artista de cabaret de 32 años Nico Semsrott.

Las encuestas dan a su formación un 2% de los votos, que podrían servirle para renovar su escaño y mantener la ironía más descarnada en la Eurocámara.