El PP iniciará la semana que viene una ronda de conversaciones con el resto de formaciones del centro derecha, que empezará con Ciudadanos, para intentar formar un gobierno "alternativo" a la izquierda en las instituciones aragonesas y cumplir "el mandato" del conjunto de la sociedad en las urnas.

El presidente del PP aragonés y candidato a la presidencia del gobierno autonómico, Luis María Beamonte, ha apelado en rueda de prensa a la "coherencia" con los resultados electorales del pasado domingo, donde su partido creció "más de dos puntos" respecto a los comicios generales pese a que concurría mayor número de fuerzas, y ha aseverado que inicia este proceso de diálogo "desde la moderación, la centralidad y el sentido común".

Un proceso que debe basarse en las "muchas coincidencias programáticas" que tienen los partidos que conforman el centro derecha, del que el PP es la referencia y entre las que ha citado el punto de vista fiscal, educativo, la despoblación o el conjunto del estado de bienestar, pero también el acuerdo en el rechazo, durante los últimos cuatro años, "en la mayoría de las veces al conjunto de las políticas de la izquierda".

Y para ello el PP aragonés, que ha reunido este jueves a su comité de dirección para analizar los distintos escenarios tras los comicios del pasado domingo, ha designado un equipo negociador para entablar estas conversaciones que estará dirigido por la secretaria general de la formación, Mar Vaquero.

Formarán parte de él también el secretario de Organización, Antonio Romero; el vicepresidente del PP, Joaquín Juste, el interlocutor con el PP nacional, Javier Campoy, y el propio Luis María Beamonte como supervisor.

Este viernes comenzarán las llamadas para intentar configurar las primeras reuniones la próxima semana, ha dicho Beamonte, quien ha añadido que su intención es iniciar esta ronda con Ciudadanos y que el plazo "no se vaya más allá del 11 o 12 de junio", aunque ha reconocido que el escenario "se complica" con el contexto general nacional.

El candidato del PP a la presidencia del Gobierno de Aragón ha insistido en que su intención es hablar "de propuestas" y ejes programáticos porque es necesaria la coincidencia en los planteamientos antes de abordar quién ocupará los cargos ya que si esa coincidencia no se alcanza, lo demás sobra.

"Las comisiones negociadoras tienen como fin acercar los ejes programáticos y los planteamientos y habrá que ir avanzando", ha insistido, al tiempo que ha recordado que el PP es la primera fuerza política del centro derecha por lo que se plantea gobernar en todas las instituciones, aunque inicialmente se requiere llegar a un acuerdo y al máximo consenso sobre un programa de gobierno con la única condición del respeto a la Constitución y al Estatuto de Autonomía.

Preguntado por la negativa anunciada por el PAR de no pactar con Vox, Beamonte no ha querido adelantar resultados de una negociación que todavía no ha empezado y ha advertido a los otros partidos de que si quieren cumplir el mandato de la sociedad aragonesa "todos tendrán que ceder de alguna manera en sus planteamientos", aunque ha subrayado que sus programas tienen muchas coincidencias y "mucha equidistancia".

Y ha desistido de tratar de convencer al PAR para que entre en un posible Gobierno de Aragón con Vox o a éstos de que no entren porque tiene "un profundo respeto" por todas las formaciones del arco parlamentario antes de destacar que se aceptó con normalidad la presencia de Podemos en las Cortes.