El Real Zaragoza fue ayer protagonista en el cierre de campaña electoral en la carrera hacia la Alcaldía de la capital aragonesa que se decide mañana. Lo fue en las redes, después de recibir un auténtico vendaval de críticas y reproches por parte del resto de formaciones políticas y de su propia afición tras la foto en el césped de La Romareda con el candidato del PP, Jorge Azcón, presentando un proyecto de reforma del estadio con el que dijo el presidente de la entidad, Christian Lapetra, coincidir plenamente. Y también a última hora, emitiendo un comunicado en el que justificaba su actuación alegando que también había hablado con otros partidos y aludió al PSOE, al PAR, a Cs y a CHA, y todos lo negaron.

«La entidad ha atendido durante estos días las propuestas realizadas de manera oficial u oficiosa por parte de partidos como el Partido Aragonés, Partido Socialista, Chunta Aragonesista, Ciudadanos o Partido Popular, a los que agradece su preocupación e interés por llevar a cabo imprescindibles mejoras en la instalación». Así rezaba el comunicado oficial del club, que añadía que «la visita este viernes del candidato de Demos Más a la Alcaldía de Zaragoza, Raúl Burillo, al Real Zaragoza, completa una serie de encuentros llevados a cabo con agrupaciones y partidos políticos, para analizar el futuro del estadio de La Romareda».

Pues bien, Burillo explicó a este diario que solicitó ese encuentro «el jueves por la tarde en un correo electrónico» y «como consecuencia de la foto de Lapetra con Azcón». «Esta mañana (por ayer) nos confirmaron que no tenían ningún problema en recibirnos», añadió. Apenas unas horas antes de ese encuentro, a las 13.45 horas y con el vicepresidente de la entidad, Fernando Sáinz de Varanda. En ese momento, las redes ya sumaban innumerables críticas.

Un buen número de usuarios mostraron en ellas su malestar por la relación electoral del Real Zaragoza con el candidato del PP. «Soy del Real Zaragoza y me avergüenzo de la actual directiva por acciones partidistas de este tipo», escribió un usuario al recordar los planes de CHA para la reforma del estadio que paralizaron los conservadores en el 2006. También mostró su malestar, entre otros, el periodista Plácido Díez: «Si la afición del Real Zaragoza es plural y diversa, ¿por qué se presta su presidente a avalar el proyecto de reforma de La Romareda de un determinado partido en campaña electoral?», se preguntaba.

Pero más llamativo fue que los partidos aludidos negaran de forma tajante cualquier contacto con el club en la campaña. Desde el PSOE recordaron, además, que su candidata, Pilar Alegría, no pudo grabar un vídeo promocional en el interior del estadio el día que se reunió con peñistas. El PAR dijo que Elena Allué «no se ha reunido con la entidad, pero cuando sea concejala no tendrá ningún inconveniente en hacerlo porque la relación es fluida». Cs también negó cualquier contacto. Igual que el candidato de CHA, Carmelo Asensio. «Decidimos presentar nuestro proyecto, que parece que ahora le gusta al PP, fuera del estadio, para no utilizar políticamente este asunto, al considerar que no era oportuno porque la masa social del club es heterogénea y plural. Estaremos encantados de trasladarla, fuera de campaña», afirmó.