Hace ya 747 martes y 25 años que EL PERIÓDICO DEL ESTUDIANTE llegó por primera vez a las aulas aragonesas. Fue en octubre de 1994. Se trataba entonces de un suplemento mensual con artículos de redactores de EL PERIÓDICO DE ARAGÓN. La periodista Marga Valiente fue una de las primeras en escribir en sus páginas. Pero enseguida se hizo cargo de la redacción Katia Aznar, que vivió más de cerca la metamorfosis del suplemento en un proyecto educativo con publicación semanal y la implicación directa de los centros. Fue en el curso 1997-98 cuando la dirección de EL PERIÓDICO -hoy representada por Nicolás Espada- apostó fuerte por la creación de un producto capaz de entrar en las aulas de forma eficaz, de llegar a los alumnos y de servir como herramienta de trabajo a los profesores para reflexionar sobre la actualidad.

Para ello, los centros tenían que implicarse porque participar en EL ESTUDIANTE suponía también formar parte del proyecto educativo, que iba más allá de las páginas que cada semana se publicaban, con concursos, formación para el profesorado, actividades, ciclos de cine, publicación de monografías, etc.

Proyecto educativo

El proyecto como tal nació de la mano de EL PERIÓDICO DE ARAGÓN -encabezado por su director de entonces, Miguel Ángel Liso- y del coordinador pedagógico del suplemento, José Antonio Gabelas, encargado del aspecto formativo de los profesores y la visión didáctica del trabajo. Ya desde el principio se creó la figura de una coordinadora de gestión, encargada de hacer de nexo de unión entre EL ESTUDIANTE y los centros participantes. Beatriz Gracia, Pilar Bordonaba, María Torrecilla, Carla Pascual, Eva Blasco o Ana Pilar López fueron algunas de las personas que realizaron este trabajo durante los primeros años.

También han sido varios los periodistas que se han ocupado semanalmente de que la información más actual y joven llegase a las aulas de colegios e institutos. A Katia Aznar le sucedió Mónica Fuentes, que le paso el testigo a Ruth Mayayo. Tras ella, los periodistas José Lacruz, Fernando Mantecón y, más recientemente, Alicia Gracia, Alberto Bobed y Laura Rabanaque, se hicieron cargo de la coordinación y redacción del suplemento.

Pero además, el equipo del ESTUDIANTE ha estado siempre complementado con la experiencia y saber hacer de diferentes personas que han ido aportando sus conocimientos y puntos de vista. Colaboradores como Toño Sediles, quien escribía artículos para la sección Dando la nota sobre actualidad musical, o Pablo Pamplona, que nos ponía al día sobre las novedades de Internet y lo último del mundo de los videojuegos en las secciones Tu pantalla y En la red. Otros nombres que han dejado huella en el ESTUDIANTE fueron los de Vicente Trigo, que planteaba enigmas semanales, o Carlos Gurpegui, siempre dispuesto a comentar los estrenos de cartelera.

Y si la colaboración de estas personas ha sido importante para llegar a este número 747, no nos podemos olvidar del papel de los instituciones que apoyan este proyecto: Fundación Ibercaja y el Departamento de Educación del Gobierno de Aragón, que hacen también posibles certámenes como el celebrado este año por el 40ª aniversario de la Constitución.

Los medios, en el aula

A lo largo de estos 25 años, han sido muchas y diferentes las actividades organizadas desde EL ESTUDIANTE. La labor de los periodistas se ha transmitido a través de diferentes charlas impartidas en los centros durante muchos cursos. Posteriormente, se sustituyeron por los talleres de prensa que tenían como finalidad elaborar una contraportada que luego se publicaba en la última página del suplemento. También se han realizado mesas de actualidad y debates sobre medios de comunicación y jóvenes, y se han impartido cursos para docentes de informática, maquetación o claves informativas.

Además, se han realizado visitas a las instalaciones de EL PERIÓDICO, se han publicado libros sobre los seminarios para profesores y se ha apoyado a los centros para la creación de sus propias revistas y periódicos digitales,

Han pasado 25 años y desde el ESTUDIANTE seguimos manteniendo nuestro compromiso con la comunidad educativa, con los estudiantes y profesores que continúan informándonos de todo lo que sucede en sus centros y de las actividades que realizan.

Docentes, por cierto, sin los cuales sería imposible sacar adelante este trabajo y a los que queremos reconocer y agradecer su labor altruista. Gracias a vosotros estamos a punto de soplar 750 velas, una por cada martes que nuestro suplemento se cuela en vuestras clases. Y esperamos seguir trabajando para vosotros, al menos, otros 750 números más.