En nuestro continuo viaje por abrir puertas, crear puentes y descubrir nuevos caminos para los estudiantes, desde el IES Ítaca de Zaragoza hemos apostado por la coordinación de un programa Erasmus de asociaciones estratégicas con diferentes países y cofinanciado por la Unión Europea. El programa Paths of Europe (caminos de Europa) tiene una duración de dos años. Está enfocado en alumnos de ESO y Bachillerato, y se realiza en colaboración con tres institutos de diferentes países: Cerdeña (Italia), Hasselt (Bégica) y Konskie (Polonia). El proyecto nos permite movilizar a 22 alumnos, que, en pequeños grupos, visitarán los países participantes.

Con el doble objetivo de proporcionar una fuente de salud y bienestar a través de las actividades al aire libre y conocer las posibles salidas profesionales que este campo brinda, recorreremos diferentes renombrados caminos de Europa. Aprovecharemos por supuesto para dar un importante impulso al inglés, ya que será la lengua de comunicación tanto entre los alumnos como entre los profesores que participan en los viajes.

Nuestro primer intercambio fue el pasado mes de noviembre. Magnífica experiencia que ha resultado aún más formativa en todos los sentidos que lo que ya intuíamos, que era mucho. Siete alumnos y dos profesoras nos desplazamos a la encantadora ciudad belga de Hasselt, en la zona flamenca del país.

Durante la semana tuvimos ocasión de descubrir la ciudad a través de un juego de pistas fotográficas de las diferentes esculturas diseminadas en los lugares emblemáticos de la ciudad. Los anfitriones belgas nos enseñaron canciones, vocabulario básico y compartieron con nosotros riquísimas recetas de sus famosos waffles, galletas y chocolates.

El día más soleado de la semana recorrimos parte del camino de Santiago en en su tramo flamenco: 15 kilómetros de suave caminata a través de un paisaje verde y húmedo, entreverado por campos de cultivo y praderas de pasto entre casitas y granjas.

Pero todavía nos quedaba descubrir la capital y centro neurálgico de la Unión Europea. Bruselas se nos mostró gris y lluviosa pero no escondió sus encantadoras callejuelas, majestuosos edificios y plazas abiertas.

Fantástica experiencia que puede llevarse a cabo gracias al enorme trabajo de los profesores implicados en el proyecto y al apoyo sin fisuras del equipo directivo del centro. Entre todos sumando horas, esfuerzo y dedicación que se añaden a las tareas habituales de docencia del cada día, con el único objetivo de la mejora en la educación de nuestros jóvenes. La recompensa de este viaje la vemos cada día en ellos.

Regresamos entusiasmados, profesoras y alumnos. Nuestros estudiantes se han manejado con soltura en inglés, han abierto su mente a otros chicos y chicas de su edad, han convivido en familias con casas, comidas, horarios y costumbres diferentes a las que conocen; han abierto sus mentes y han hecho nuevos amigos. Tienen proyectos, ideas, ganas. Una gran experiencia que no ha hecho sino comenzar.