No es lo común que un día entre semana, en lugar de dar clase, se nos presente la ocasión a los alumnos de 3º de ESO de disfrutar de un día de convivencia. Pero es lo que nos sucedió el curso pasado a los alumnos del Colegio San Vicente de Paúl de Zaragoza. La verdad es que lo de no dar clase nos sonaba bien, pero con lo de «convivencia» teníamos un cierto interrogante y hasta a algunos de nosotros nos daba cierta pereza.
Pues bien, el 17 de abril nos juntamos todos los alumnos de los cuatro colegios Vicencianos de Zaragoza y nos llevamos una muy grata sorpresa. Resultó ser un día totalmente distinto en el que disfrutamos mucho.
Por la mañana participamos en grupos mezclados de los cuatro centros de las Hijas de la Caridad en una yincana. En cada prueba, a través de juegos o dinámicas, reflexionábamos sobre el individualismo, el poseer, el placer y el poder.
¿Cómo soy realmente feliz? ¿Qué le hace feliz al otro?... Divertirse y parar un poco a reflexionar siempre es bueno.
En la Villa Santa Luisa y gracias también a que tuvimos un tiempo excepcional, pudimos gozar de una comida al aire libre juntos y un buen rato de juego entre nosotros.
Al terminar el día nos quedamos con el buen sabor de boca de haber compartido y gozado con gente nueva. Hay que abrirse a las cosas y dejarse sorprender y no olvidar nunca de dar importancia a lo realmente importante. ¡Gracias por facilitar estos encuentros!
