Los datos indican que en ciudades de tamaño similar al de Zaragoza más del 60% de los trayectos son de menos de 5 kilómetros. Además, al ser desplazamientos relacionados con ir a trabajar normalmente se hacen sin compañía. Eso explica que tanto las motos como las bicicletas y los patinetes eléctricos compartidos estén experimentando este crecimiento y empiecen a ocupar espacios hasta ahora reservados únicamente a los coches.

Las bicicletas del servicio Bizi Zaragoza siguen siendo una de las alternativas más económicas para moverse sin humos por la ciudad. Cualquier ciudadano puede utilizarlas pagando una cuota de 36,93 euros al año. Entre las características del servicio destaca la obligación de aparcarlas en las estaciones y su límite de uso es de 30 minutos.

A estas bicis rojas se suman las naranjas y grises de la empresa Mobike, que acaba de aterrizar en Zaragoza. Por ahora son 300 las bicis de esta multinacional que se pueden encontrar por cualquier calle, ya que no tienen estaciones fijas. Para utilizarlas basta con descargarse una aplicación en el móvil. Hay tres modalidades de pago: 1 euros por 20 minutos, 5,99 euros por todo un mes y 29,99 euros por un semestre.

Muving es la empresa que ofrece motos eléctricas compartidas en Zaragoza. Son amarillas y negras y hay unas 200 disponibles. Cualquier persona con carné de conducir y un teléfono móvil puede utilizarlas por un precio de 0,21 euros el minuto y 0,10 en parada.

Finalmente, el éxito del patinete compartido es incuestionable. En los últimos meses tres empresas se han instalado en Zaragoza para ofrecer este servicio -Koko, Lime y VOI- con 500 de estos dispositivos repartidos por toda la ciudad. El coste del servicio es de 0,15 euros el minuto y, al igual que las bicis de Mobike, se pueden aparcar en cualquier sitio.