Galopaba un caballero de bonita armadura,

andante era y vivía en Granada.

Bruno de la Vega se hacía llamar,

razón de más le podía faltar.

Ideas sin sentido tenía

entre aventuras.

Lastimado con heridas salía,

ante locuras.

Mediante la lucha,

intrigado con la pelea escucha.

Histórico en el mundo,

ante el vagabundo.

Listo durante la batalla,

uvas de colores comía,

tras el fin de sus días.