Alrededor de 100.000 personas asistieron y participaron en algunas de las más de 180 actividades programadas en la Noche en blanco, que tuvo lugar la noche del sábado.

A las 20.00 horas, momento del inicio de la mayor parte de propuestas, ya se veían largas filas en las puertas del antiguo Casino Mercantil --actual sede de Bantierra-- y de Capitanía General --recién reformado--, dos de los edificios que se han sumado este año por primera vez a la Noche en blanco para ofrecer visitas guiadas a su interior. Además, el recién estrenado CaixaForum también registro una excelente entrada a sus instalaciones durante todo el día. La presencia de numerosos grupos por las calles y plazas del centro y del casco histórico impregnó de un excelente ambiente la noche, ya que los artistas se alegraban de la buena acogida y el público agradecía la presencia de tantas y variadas propuestas culturales, según un comunicado del Ayuntamiento de Zaragoza.

Por tanto, la cuarta edición de la Noche en blanco, que ofertaba 182 actividades en más de 90 espacios, y la mayoría gratuitas y al aire libre, se ha saldado con un gran éxito. El consejero de Cultura del Ayuntamiento de Zaragoza, Jerónimo Blasco, señaló ayer que "en este escaso tiempo, en sólo cuatro años, ha logrado convertirse en una cita obligada del programa cultural de la ciudad". "Los zaragozanos han demostrado que les gusta la esencia, el formato, de este programa que combina a partes iguales cultura, ocio y una visión diferente de la propia ciudad", añadió Blasco.

La Noche en blanco presentaba en esta edición más de 180 actividades --el triple que el primer año, 2011, y casi un 30% más que en 2013--, lo que permitió convertir a Zaragoza en un inmenso escenario urbano durante las seis horas --de 20.00 a 02.00 horas-- que se prolongó la programación. El año pasado asistieron alrededor de 60.000 personas.