Esta noche son los Oscar. Siempre me reúno con seis amigos para verlos y disfruto mucho observando cómo tres de ellos se enrabian por las polémicas que siempre giran en torno a los premios.

La falta de presentador, el intento de boicotear algunas categorías y darlas en la publicidad o el deseo frustrado de crear una candidatura nueva sobre las películas más populares han sido algunas de las polémicas. Ninguna le ha salido bien y la Academia ha debido recular en sus propuestas. Aunque uno de los amigos sostiene lo contrario...

Tercer puesto. Green Book, escrita por Nick Vallelonga, Bryan Currie y Peter Farrelly. La pareja Mahershala Ali y Viggo Mortensen logra una química estupenda y su contraste es lo mejor de esta película.

Segundo lugar. El muchacho de los cabellos verdes, escrita por Ben Barzman y Alfred Lewis Levitt (Filmin). Un bello canto a la diferencia que aunque pasen los años no pierde un ápice de verdad y te hace ver la sencillez de la vida.

Primera posición. Creed 2, escrita por Sylvester Stallone y Juel Taylor. Siempre me entusiasma cuando Stallone vuelve a escribir parte del guión y acierta en la recreación de ese Ivan Drago repleto de odio y ternura.

Y lo que piensa uno de mis amigos es que en realidad todas las propuestas de la Academia les han salido bien, pues la idea no era conseguir que se implementasen sino crear con esos globos sonda polémica para que la gente hablase más de esta edición.

El sostiene que la Academia descubrió con el exitoso momento del sobre de La la land que lo importante no es fallar sino el acierto de saber fallar en el momento oportuno.

Me gusta su planteamiento, al fin y al cabo muchas veces pasa lo mismo en la vida donde descubres que muchos errores en realidad son aciertos fuera de contexto. ¡Feliz noche de los Oscar!