La alianza necesaria del periodismo y la literatura

AUTOR: Manuel Vicent / Varios

EDITORIAL: Alfaguara / Marenostrum

PAGINAS: 324

La reciente colección de artículos de Manuel Vicent (Villavieja, Castellón, 1936) Nadie muere la víspera, prologada por Manuel Rivas, no tiene subtítulo porque encierra en su interior algo más que eso. Ha dejado atrás todo acomodo bajo palabras como selección o antología para dibujar en columnas de 35 espacios un tratado sobre el arte del buen vivir, auxiliado por la sabiduría que otorga el conocimiento de dioses menores y otras materias.

De no haber existido un Cavafis en Alejandría, tendríamos al Vicent de Dénia, porque lo que trasladan sus textos es una suerte de convenio moral con nosotros mismos, un pacto visceral por donde transitar con la garantía que otorga lo que se conoce desde la infancia: la creencia ciega en los sentidos, y los pensamientos que se revelan en las primeras intuiciones, valiosísimas, pues suponen un conocimiento primigenio de nuestro propio carácter.

Veinte años escribiendo en la última página de El País, y de ésos, cuatro, que son los que recupera a modo de itinerario novelesco en Nadie muere la víspera, casi un dietario intemporal plagado de momentos en los que el lector acaba por entender el periodismo como otro de los géneros en los que se guarece la ficción, minándolo sin remisión. Lo novelesco viene dado por la propia estructura del libro: se inicia con una transgresora fábula bíblica y termina con un breve tratado sobre el arte de la escritura de artículos literarios; en medio, todo lo que la experiencia diga que puede caber en una novela.

Si, como dice Vicent, el charlestón es más recordado que la batalla del Marne, el buen hacer de estas páginas no hace ociosa la idea de que los artículos periodísticos escogidos habrán de sobrevivir a su autor, también novelista.

El profesor y crítico Pedro de Miguel no se ha olvidado de Vicent en su edición de Articulismo español contemporáneo, que concibe el género como uno de los fenómenos sobresalientes de la prensa reciente. La panorámica ocupa el último siglo de producción periodística, con una centena de antologados. El lector podrá ir de la mano de Galdós a la de Muñoz Molina, de la de Clarín a la de Marías, de la de Valle-Inclán a la de Vila-Matas.