Huesca Alrededor de 500 niños oscenses (desde bebés hasta jóvenes adolescentes) adoraron ayer la imagen de San Lorenzo en la basílica de la localidad en un acto que se realizó por primera vez en las fiestas laurentinas. La cola para pasar a saludar al santo (el primero de la fila apenas contaba con 16 meses) superó una hora de duración en un acto impulsado por la cofradía de los Caballeros de San Lorenzo.