Lupe es "una mujer atrincherada en casa que padece agorafobia y que se dedica a hacer tartas de manzanas". Lupe es el personaje que interpreta Elena Anaya en Todos están muertos; y hace referencia a una mujer con una personalidad que vive "con fantasmas pendientes de algo que se quedó en el pasado". Así es la nueva película protagonizada por la intérprete palentina y dirigida por Beatriz Sanchís. Ambas fueron ayer las invitadas de un nuevo ciclo de La buena estrella.

La película que se estrenó en Madrid el pasado viernes y --por motivos ajenos a su deseo-- habrá que esperar hasta el día 13 para poder verla en los cines de la capital aragonesa. Sanchís dejó entrever su malestar por este motivo. "Si no vives en la capital de España corres el riesgo de que no reproduzcan películas maravillosas", se quejó.

Todos están muertos esta ambientada en los años noventa porque "tenía mucho interés en ubicar en esta década la película", admitió la directora. Se trata de un trabajo que refleja lo que vino inmediatamente después de la movida madrileña, "uno de los momentos más libres" cargado de "un gran un espíritu" que despertó su atención desde el primer momento.

Para Anaya, trabajar con una directora novel --aunque ha realizado algún cortometraje, entre ellos La clase, que fue candidato a los Goya--, ha sido positivo. "El enfoque que Beatriz le ha dado a la película ha sido muy vital y optimista", comentó la actriz, asegurando que "tiene una idea muy clara desde el principio" a la hora de trabajar. Y es que, pese a que a rodado a las órdenes de directores como Julio Medem o Pedro Almodóvar, elige los proyectos cinematográficos en los que participa "con el corazón" más que con la cabeza, por eso no le importa trabajar con directores que empiezan y que muestran "perseverancia y valentía"; por que lo importante es "sentir el flechazo" con un guion que merece la pena.

PRIMER LARGOMETRAJE

Sanchís califica su debut como debuta "positivo". Eso sí, matizando que "es duro hacer cine en este país en este momento". Sin embargo, "con perseverancia todo sale", sentenció. Además, es además la autora del guion, una labor que "ha resultado difícil" aunque siempre tuvo claro para quien iba destinado. "Escribí este guion pensando en Elena desde el primer momento", desveló.

Todos están muertos ha cosechados ya varios premios en el Festival de cine español de Málaga; el premio especial del jurado y el de mejor interpretación, que recayó en Anaya. En este sentido, la intérprete señaló que es uno de los "más bonitas y especiales" trabajos que ha realizado.

Ambas profesionales se refirieron también al éxito de Ocho apellidos vascos y al enganche que puede ejercer para promocionar otras películas de cine español. Una posibilidad que no descartaron. "Siempre es positivo que una película española tenga tanto éxito", afirmó Sanchís.

PROYECTOS

La que fuera protagonista de Lucía y el sexo desveló que en breve se estrenará una película del director Colin Kennedy titulada Swung y que ha grabado en Glasgow. Además, "en tres semanas me voy a grabar a Chile" La memoria del agua, bajo las órdenes de Matías Bize.

En cuanto a su faceta como actriz de teatro, Anaya aseguró que "tengo muchas ganas de hacer teatro" y desveló que "hay un par de proyectos que tengo pendientes para el año que viene". Para ella, "hacer teatro es una maravilla, una escuela". Preguntada por si tenía pensado participar en alguna serie de televisión, contestó que "yo vivo al día, al minuto" y que "nunca he hecho televisión ni sigo ninguna serie", explicando que "prefiero hacer cine".