Anita Nair es una de las voces que cuentan en el panorama de la literatura india en inglés. Esta mujer de 37 años se ha convertido en testigo de excepción de las contradicciones de su país.

En España se dio a conocer hace dos años con El vagón de las mujeres (Alfaguara), de aroma levemente feminista, pero la novela con la que realmente se convirtió en escritora --y un éxito indiscutible en su país-- es Un hombre mejor, escrita unos años antes y que ha venido a presentar a España.

Este retrato de un hombre, perseguido por el recuerdo de un padre tiránico y una madre abandonada, que regresa al pueblo donde nació para vivir un complejo proceso de transformación surgió en la imaginación de la autora en una encrucijada personal. Sus padres decidieron vender la vieja casa familiar en un aldea de Bangalore (India) y ella acababa de dar a luz a su hijo Maitreya.

"Para mí --recuerda--era una situación muy dolorosa porque mi familia había vivido en esa casa durante 600 años. Lo único que podía hacer era tomar nota de los paisajes y recordar algunas de las anécdotas del pueblo para regalárselas a mi hijo que no podría conocerlas". Cuando los apuntes se convirtieron en novela y la novela en un éxito, Nair logró aplacar sus miedos. "La casa no se vendió y yo en actualidad estoy construyendo en ese lugar".

Aunque el final fue feliz, la elaboración de Un hombre mejor no estuvo exenta de complicaciones porque a la autora le faltaba esa habitación propia que según Virginia Woolf necesita cualquier autora. "Mientras la elaboraba vivía junto a mis tíos, mis sobrinos, mi hijo, naturalmente, y mucha gente más; así que sólo podía huir dentro de mi propia cabeza y de ahí salió todo ese mundo imaginario".Porque de eso se trata, según Nair, de un mundo imaginario que refleje las pequeñas vidas cotidianas de una aldea india.

"Mi imaginación tuvo que disfrazar mucho los posibles retratos al natural, porque no quería herir suceptibilidades".