‘Nosotras. Historia de mujeres y algo más’

Rosa Montero

Alfaguara

Recuerdo perfectamente, a pesar del tiempo transcurrido, cuando leí por primera vez Historias de Mujeres, de Rosa Montero, editado por Alfaguara. Fue para mí una ventana al mundo. Es uno de esos libros que ayudan a descubrir momentos y a encontrar personajes, y en este caso en concreto a conocer mujeres que me han aportado inspiración y compañía en todo lo vivido a partir de entonces. Lo conservo con un cariño inmenso, como se hace con todo aquello que se ha convertido en referente y a lo que se puede volver una y otra vez sin que exista el riesgo al desencanto.

Me gustó mucho que tan laborioso trabajo comenzara con Agatha Christie, a la que yo tanto he admirado siempre. Me recuerdo, sí, muy jovencito leyendo su autobiografía en una de esas bibliotecas de barrio que tanto proliferaban entonces y tanto escasean hoy. También sabía quiénes eran las Brontë, Simone de Beauvoir o Zenobia Camprubí. Pero no importaba, en estas páginas aprendía sin cesar y encontraba mujeres apasionadas y apasionantes que de buena manera habían logrado cambiar el mundo y que hoy lo siguen haciendo porque las revoluciones pasadas contribuyen a engrandecer la vida presente. Gracias a aquellas páginas conocí a Frida Kahlo, Aurora y Hildegart Rodríguez, Margaret Mead o María Lejárraga por ejemplo, acaparando todas ellas mi interés y animándome a averiguar más con el fin de saberlo todo. Es lo más hermoso que tienen los libros: que nos despierten deseos que jamás habrán de apagarse. Han pasado un par de décadas y no he olvidado a ninguna de estas mujeres porque cada uno de sus retratos, pequeñas biografías llenas de intensa vida, se sumaron inmediatamente a mi imaginario. Desde el mostrador que me permite recomendar cada día las páginas que al cliente habrán de hacerle vibrar, me permito afirmar que los libros escritos por Rosa Montero son siempre seductores. Poseen la fuerza de la emoción puesta en palabras, e invitan al lector a escuchar más que a leer. Me encanta pasear por las líneas que la autora construye con tanta maestría ampliando incluso ese vocabulario que muchos tenemos más limitado de lo que nos gustaría. La suya es una narración viva, llena de certezas, que llega hasta donde la mirada no alcanza. Y por eso sus personajes, reales o ficticios, se quedan.

Hoy estas mujeres, que en realidad nunca se fueron, han vuelto, y vienen acompañadas. En esta nueva y hermosa edición, encuadernada en tapa dura, ilustrada por María Herreros y titulada Nosotras. Historias de mujeres y algo más, se suma un nuevo descubrimiento cuyo nombre me reservo y otros tantos apuntes biográficos que me remiten a momentos alojados en mi memoria de cuando me permitía sorprenderme más a menudo. Se trata de una larga lista que exige atención y que cautiva por la fuerza con la que de repente, al observar sus nombres, parecen emerger sobre el papel. Todas ellas son mujeres ejemplares aunque en los tiempos pasados apenas nadie las haya puesto como ejemplo. Rosa Montero construye retratos breves, concisos, escuetos pero llenos de vida y de reconocimiento porque forman parte de la Historia con mayúsculas gracias a la propia, la suya, la personal, la que nos pertenece en exclusiva a cada uno y a la que nadie puede acceder en su totalidad, acaso rozando levemente. Por lo que cabe pensar que cualquier logro fue mucho mayor de lo que creemos. Cualquier dificultad, también.

Hay un prólogo estupendo, un posfacio estupendo, y muchos caminos por los que transitar para que a su vez surjan nuevas preguntas, nuevas sensaciones y nuevos nombres que han de ponerse en su sitio. Este es un libro que no se hace mayor porque el paso de los años le recuerda que la actualidad lo necesita. Y los lectores también.