El Auditorio acoge hoy de forma simultánea a dos importante músicos del panorama actual. Antonio Orozco y Andrés Calamaro coinciden esta noche en este espacio, pero en diferentes salas. Mientras el argentino actuará en la sala Mozart a las 20.00 horas, Orozco hará lo propio en la multiusos a partir de las 21.00 horas. Dos estilos diferentes que convergen en la capital aragonesa arrastrando a un gran número de seguidores.

Ozean' s Club es el nombre de la gira que está llevando a Antonio Orozco por numerosas ciudades españolas y que aterriza en Zaragoza para presentar su último disco, Dos orillas, donde el cantante fusiona el sonido pop que le caracteriza con nuevos aires más electrónicos, una mezcla que se debe a que "todos los artistas estamos a expensas de la evolución de la música". Además, está convencido de que tiene "una enorme suerte al poder ir cambiando los estilos, probar cosas nuevas, y ver que tienen buena acogida por parte de la gente". La innovación es algo que siempre debe de estar presente apunta este barcelonés que parece oriundo de Triana.

ÉXITO

A penas 24 horas después de salir a luz, a finales del pasado año, Dos orillas consiguió alcanzar el pódium convirtiéndose en Disco de Oro. Pero Orozco es humilde. Reconoce que "el salir en televisión me ha podido ayudar a que el disco salga con tanto éxito". Se refiere a su participación en el talent show de La voz, sustituyendo a Melendi como coach. Una experiencia "alucinante" porque me ha "cambiado la forma de vivir". Para él, se trata de un programa "inolvidable" que le ha hecho "sentir cosas que nunca hubiera imaginado sentir en televisión", un medio en el que "nunca había estado, salvo para las entrevistas". Respecto al resto de personalidades que participan en La voz, Orozco se decanta por David Bisbal. "He tenido una gran suerte al estar con este grande que tiene una corazón maravilloso".

Dos orillas debe su nombre a que se ha producido a medio caballo entre España y Estados Unidos. "Creo que todos tenemos dos orillas y esas son las mías", desvela el artista catalán. Se siente satisfecho con todo el disco, pero si tuviera que quedarse con una sola canción de este trabajo sería con Eres, un tema que "en este momento de mi vida, esta canción es perfectamente mía".

Haciendo un ejercicio de retrospectiva, cuando en el año 2000 Orozco hacía sus primeros pinitos en los escenarios, recuerda la primera vez que estuvo en Zaragoza. "Fue en el La Casa del Loco", rememora. 14 años después ironiza con los asistentes a sus conciertos: "Hace año solo eran 200 y ahora...".

Posiblemente, nunca hayan estado tan cerca Antonio Orozco y Andrés Calamaro. "No hemos coincidido en ningún concierto", afirma el primero. "Supongo que tenemos estilos diferentes". El argentino, tras recorrer Suramérica, continúa con su gira española para presentar Bohemio, su última creación. Un disco que reúne una decena de temas muy en su línea roquera.