Enrique Bunbury regresa a su ciudad natal con Palosanto tour, la gira con la que presenta las canciones de su último disco, sin duda su trabajo de contenido más social. Lo hará hoy, a las 21.30 horas, en el Pabellón Príncipe Felipe, después de que el jueves iniciara en Barcelona su periplo español.

Antes de desembarcar en nuestro/su país, Bunbury ha recorrido buena parte del continente sudamericano con este espectáculo, a cuya música suma un gran despliegue técnico en la que es la escenografía visualmente más potente de toda su carrera y con elementos como una nave extraterrestre del que desciende el músico al comenzar el concierto.

La gira inició su andadura en la plaza Condesa de Ciudad de México el 14 de enero, un país, México, que ha acogido otros 12 conciertos del músico aragonés en ocho ciudades distintas. República Dominicana, El Salvador, Costa Rica, Colombia, Perú, Ecuador, Chile y Argentina fueron las siguientes paradas.

Hasta que tocó cruzar el charco, con la mala suerte de que su guitarrista, Jordi Mena, tuvo que ser operado de urgencia por desprendimiento de retina, lo que obligó a aplazar los recitales de Valladolid, Santiago de Compostela, Granada y Sevilla. Así que el primer concierto español tuvo lugar el jueves en Barcelona, ya con Dani Padilla como nuevo guitarrista.

En cuanto al repertorio, Bunbury ha cambiado varios temas en los distintos conciertos, recuperando piezas que nunca tocaba como Contracorriente y desgranando prácticamente todo el nuevo disco (siete u ocho canciones), cuyas canciones se apoyan visualmente "para explicar con imágenes y de manera más clara lo que quiere decir el álbum", comentaba. Eso sí, siempre ha comenzado con Despierta y concluido con El viento a favor, y entre ellas clásicos como El extranjero, Infinito o Lady Blue, entre otros.

Bunbury, que recibió la pasada semana en Madrid un Disco de Oro por las ventas de Palosanto en España, habló del contenido de este último su trabajo, que reflexiona sobre un mundo que podría cambiar partiendo de la revolución personal.

Y es que, como explicó en la presentación de la gira española, regresa a su país en un momento "más alegre y mejor que el de hace cuatro años", en consonancia con el "sabor positivo" que impregna la temática general de Palosanto y en relación a los cambios que está observando en España y quizá plasmados a raíz del 15-M: "Si pasado mañana se revisa la monarquía, la Constitución, la ley de partidos y la forma de entendernos entre los territorios, todo eso serán buenas noticias", decía el artista.

Y eso sí, si bien utiliza sus canciones para trasladar a ellas su ideas y sus estados de ánimo, sobre todo sigue empleando la música para disfrutar: "Sigo pensando que tengo la profesión más bonita del mundo y creo que no me he equivocado escogiéndola", concluyó su presentación en Madrid. Un entusiasmo que, sin duda, se esmera por trasladar al público.