TEATRO DE SOMBRAS

AUTOR Adolfo Burriel

EDITORIAL Vitrubio

PÁGINAS 81

PRECIO 11 euros

Negra es la portada del más reciente libro de poemas de Adolfo Burriel, un color acorde con su título, Teatro de sombras, y en cierto modo con el tono general que recorre los versos de este poemario, en los que las tinieblas le ganan la partida a la luz en más de una ocasión. Burriel sabe cómo se le puede sacar partido a la derrota, y este libro es buena muestra de ello.

La cita que sirve como encabezamiento --unos versos de Góngora-- es adecuada para centrar su contenido: "El sueño, autor de representaciones, / en su teatro, sobre el viento armado, /sombras suele vestir-". Ahí se pueden encontrar palabras que definirían bien los ambientes propuestos en los versos de Burriel: sueño, representación, teatro, sombras- Los poemas del libro pueden leerse como una sucesión de escenas entre la realidad y el onirismo, entre el recuerdo y la figuración, o entre el realismo más agudo y el lirismo más sutil.

Una de las cosas que más llama la atención de este Teatro de sombras es la gran cantidad de nombres propios que aparecen en los poemas. Algunos --bastantes-- serán conocidos para los lectores, como es el caso de los escritores, músicos o artistas mencionados; otros quizá no tanto. Pero todos pertenecen indudablemente al universo personal del autor, quien los convoca como personajes.

Esa abundancia de referencias hace que la lectura de este libro recuerde a la de los novísimos. Pero no es la única característica que lo emparenta con esa generación española de los 70: el discurso fragmentado, las imágenes irracionales, la lógica suspendida y la búsqueda de una palabra siempre precisa también recuerdan lo mejor de aquella poesía.