El Tribunal de Vilna (Lituania) condenó ayer a ocho años de prisión a Bertrand Cantat por el asesinato de su compañera sentimental, la también actriz gala Marie Trintignant. "Sí, he comprendido", respondió Cantat a la pregunta de si había entendido el veredicto.

La audiencia tuvo una duración de 15 minutos. El fiscal de Vilna, Vladimiras Sergeyevas, quien había afirmado que la investigación aportó pruebas irrefutables de que Cantat asesinó a golpes a la actriz, había pedido a los jueces nueve años de cárcel. En su alegato, el fiscal destacó como agravante que el cantante del grupo Noir Désir se encontraba en estado de embriaguez en el momento del crimen, producido en la noche del 26 al 27 de julio del 2003 en un hotel de Vilna.

La defensa centró sus alegatos en que Cantant nunca tuvo la intención de matar a su compañera sentimental. En opinión de los abogados, el delito se podía calificar como "homicidio por imprudencia" que, según la legislación lituana, se castiga con cuatro años de prisión, pero los tres jueces desestimaron los argumentos de la defensa.

El propio Cantat, en su última declaración ante los jueces, el pasado día 22, dijo que era "consciente de la gravedad de las consecuencias" y asumió la responsabilidad de los hechos. "Sin embargo, nunca quise que eso ocurriera. Amaba a Marie y la amaré siempre", expresó Cantat. "Cada segundo pienso en ella. La única cosa que puedo hacer es rogar el perdón", agregó.

Nadine Trintignant, no creyó en el perdón pedido por Cantat ni en su remordimiento. "Si lo hubiera lamentado, se habría detenido después del primer golpe", declaró la madre, que estuvo presente en el proceso. Trintignant murió el 1 de agosto del 2003, a los 41 años. El abogado de Cantat ha anunciado que apelará la sentencia.