Carlos Domingo inauguró ayer en el Museo de Teruel la exposición Dócil con la que este artista, que relaciona el individuo con la naturaleza, confronta sus primeras obras con los trabajos más recientes. Así lo explicó el propio Domingo en su muestra: «Me preguntaba si las obras de hace más de diez años aguantarían el paso del tiempo y ha sido muy grato comprobar que mi obra reciente no ha cambiado mucho. No sé si es coherencia o tozudez, pero para mí es bueno saber que sigo en la línea que me empuja a crear». Esa línea de trabajo es la que se resume en la exposición que podrá verse hasta el próximo 16 de abril. La selección de obras bajo este título, según el autor, hace alusión a la idea de aprendizaje, «de cómo una persona que se socializa se va quitando una parte de su animal, que lo convierte en más dócil».