Han pasado nueve años desde que Roscón rock comenzó a rodar cada 29 de enero por el centro zaragozano. La idea original partía del deseo de hacer de la música un instrumento con el que los ciudadanos disfrutasen. Además, era una fórmula óptima para que los músicos aragoneses pudieran darse a conocer. Casi una década después, un total de 318 grupos han pasado por alguna de las ediciones realizadas hasta la fecha de ayer, ya que incluso en el último día se apuntan nuevos grupos. "Me da una gran pena que en la décima edición no vayamos a tocar", comentó ayer Carlos Morte, quien justificó la postura de los organizadores del Roscón rock al afirmar que "no nos gusta haber tenido que llegar hasta este punto".