El caso contra Michael Jackson por abuso de menores ha dado un inesperado giro ante el súbito cambio de abogados del cantante, pocos días antes de que se presente la acusación formal para decidir el calendario del proceso.

"Sirva de aclaración que no he reemplazado mi defensa. He reemplazado a los abogados más destacados", indicó ayer Jackson en un comunicado en su página en internet (http://www.mjjsource.com).

El cambio abre una nueva etapa en este llamativo proceso, en el que está prevista para el viernes la presentación oficial de los cargos contra la superestrella del pop que aprobó la semana pasada un jurado de investigación. No se esperan sorpresas en los cargos, que casi con plena certeza coincidirán con los siete de pederastia y dos de embriagar a un menor de los que se le acusa.

Sin embargo, la sorpresa ha llegado de la mano del cantante, con el anuncio de un drástico cambio de abogados en un momento en el que la defensa debiera estar reforzando su estrategia. "Es una decisión inevitable, dadas las circunstancias", subrayó el letrado Benjamin Brafman en un comunicado al informar de su marcha.

Junto con Mark Geragos, Brafman explicó que su salida está relacionada con numerosas complicaciones "legales y prácticas", pero se negó a entrar en detalles. Tan sólo reconoció que las complicaciones se han ido gestando durante varias semanas, en las que las divergencias entre el equipo de abogados y su cliente y los que le rodean han ido en aumento.

ALGO ´NECESARIO´

En su comunicado, Jackson justificó su marcha, o sustitución, como prefirió llamarlo, como algo necesario para sus intereses. "Es necesario que cuente con toda la atención de los que me representan", señaló el cantante en referencia a que Geragos defiende a Scott Peterson de las acusaciones de asesinar a su esposa embarazada, uno de los casos más destacados en EEUU.

El vacío dejado por Geragos y Brafman fue rápidamente ocupado por el criminalista Thomas Mesereau, que se unirá a Steve Cochran y Robert Sanger en la defensa de Jackson. Si las credenciales de Brafman y Geragos les sitúa entre los mejores criminalistas del país, lo mismo ocurre con Mesereau, conocido entre otros por haber defendido al boxeador Myke Tyson.

Meserau también llevó durante un tiempo la defensa del actor Robert Blake, acusado del asesinato de su esposa. La relación entre Mesereau y Blake concluyó antes incluso de que su juicio haya dado comienzo, por "diferencias irreconciliables", oportunidad que Jackson ha aprovechado para contratarle.

Según declararon a la prensa fuentes cercanas al caso, Jackson deseaba contar con Mesereau desde hace meses, debido a la carrera del abogado en casos relacionados con la comunidad negra. Este puede ser uno de los factores determinantes para el cambio de letrados, dado el cada vez mayor interés que ha demostrado el intérprete en convertir su caso en un conflicto racial.

Mesereau ha estado reunido desde su nombramiento con Jackson en Orlando, donde el cantante está recluido con sus hijos.

Se espera la presencia de Jackson en la próxima audiencia de este proceso, aunque no se descarta que Mesereau solicite un aplazamiento para dar tiempo a familiarizarse con el caso. En esta audiencia se presentarán de manera formal las acusaciones decididas por el jurado de investigación, momento que permitiría fijar un calendario para el que promete ser el juicio del año.