El director de la Asociación Aragonesa de Escritores, Javier Fernández, junto al director general de Cultura y Patrimonio del Gobierno de Aragón, Nacho Escuín, presentaron ayer el undécimo ciclo Poesía para Perdidos en la Bóveda del Albergue. Fernández recalcó que se trataba de un día «muy especial» porque hace diez años que este ciclo se organiza y porque se ha convertido en todo un referente en la comunidad: «este es uno de los actos culturales que se celebran de forma repetitiva más llamativos de Aragón», aseguró.
En esta edición del ciclo, que contará con ocho entregas, se ha hecho un esfuerzo mayor que otros años por traer a gente con relevancia en el panorama nacional para celebrar el aniversario. Alberto Santamaría, Luis Bagué y Alejandra Vanessa son algunos de los nombres que participarán este año, pero según afirman sus organizadores, todos los años ha habido «gente de fuera y de aquí» y mucha gente joven. En total se han celebrado más de 120 encuentros por los que han pasado la totalidad de los poetas aragoneses, según apuntó Escuín.
Impulso cultural// Fernando Sarría, impulsor de estos recitales, defendió que estos actos son «la mejor manera de que la gente conozca a los poetas» y se congratuló de los avances realizados en estos diez años, ya que actualmente hay muchos más recitales de poesía que antes. El ciclo de Poesía para perdidos cuenta, asimismo, con el apoyo del Gobierno de Aragón. El propio Escuín ha sido parte del cartel de participantes en varias ocasiones y ayer quiso acompañar a los organizadores en la presentación. Además, este apoyo se materializa en una dotación de unos 4000€ que varían en función de las necesidades de desplazamiento de los participantes. Escuín recalcó la necesidad de pagar a los autores porque desde el gobierno «apuestan por la cultura profesional». Además añadió que este tipo de celebraciones son parte «fundamental de los planes de fomento de la lectura».
MÚSICA PARA AMENIZAR // Los recitales se celebran siempre el último sábado del mes y tienen una duración de hora y media. En cada uno participan dos o tres autores siempre acompañados por un músico. Pilar Aguarón, secretaria general de la Asociación Aragonesa de Escritores, que también estuvo presente en el acto, recordó que existe un ciclo paralelo de relatos que se celebra siempre el domingo que sigue al recital Poesía para perdidos. Desde la organización resaltaron también la idoneidad del espacio en el que se celebran estos encuentros, la Bóveda del Albergue de Zaragoza. Pero, este viejo y laberíntico sótano situado en la calle Predicadores no ha sido la primera sede del ciclo. La Campana de los Perdidos fue la primera sala que acogió a estos poetas y de ahí precisamente surge su nombre.
Las sesiones de esta undécima edición tendrán lugar en marzo, abril, mayo, junio, octubre, noviembre, enero y febrero.
