El Museo de Teruel terminó el año con un aumento de visitantes del 5,4 % con respecto a 2015 hasta alcanzar las 37.797 personas, lo que supone la segunda mejor cifra de su historia.

Según han dado a conocer hoy en rueda de prensa los responsables del museo de la Diputación de Teruel, el aumento supone un 22,1 % con respecto al promedio de los últimos siete años, en los que la cifra resultante es de 30.942 personas.

Teniendo en consideración exclusivamente la comparativa directa entre el año recientemente finalizado y el inmediatamente anterior, los meses que han experimentado un crecimiento más notorio han sido, por ese orden, junio, julio, marzo y enero.

Otra de las tendencias que se han visto reafirmadas en 2016 ha sido el aumento de visitantes extranjeros en la cifra global, un 4,8 % sobre todo de Francia, Reino Unido, Holanda, Alemania, Rusia y China.

Junto a ellos son significativos también los visitantes procedentes de Italia, Rumanía, Bélgica, Estados Unidos, Argentina y Japón.

Para el diputado delegado del Museo de Teruel, Juan Carlos Gracia Suso, las cifras demuestran el buen trabajo del Museo, tanto con la exposición permanente como las temporales y la organización de actividades complementarias, línea de trabajo que continuarán.

Por su parte, el director del Museo, Jaime Vicente, ha destacado que los datos demuestran "una clara desestacionalización del turismo de la ciudad" además de "un incremento en el uso del Museo como instrumento educativo por parte de los colectivos relacionados con la enseñanza".

Durante 2016 el Museo también ha desarrollado una intensa actividad arqueológica, tanto en lo referente a la investigación, como en la conservación y difusión del patrimonio arqueológico turolense, con distintas excavaciones como en la ciudad romana de La Caridad.

Por otra parte, se ha desarrollado la segunda fase del proyecto "Estudio del poblamiento andalusí en el Sur de Aragón", con excavaciones en los yacimientos de Alcañiz el Viejo (Alcañiz) y Cabezo de la Cisterna (Alba del Campo).

El Museo de Teruel ha asumido los trabajos de limpieza y mantenimiento de los poblados ibéricos de El Palomar y Cabezo de San Pedro en Oliete, el yacimiento celtibérico de Alto Chacón (Teruel) y la villa romana de La Loma del Regadío en Urrea de Gaen, con el fin de garantizar su perfecta conservación y comprensión por parte de los visitantes.

También en 2016 se han iniciado las obras de ampliación del Museo de Teruel en las dependencias del Palacio del Marqués de Tosos, centrándose en la consolidación de las fachadas, el traslado de los elementos más significativos para su posterior reinstalación y en la realización del excavado de los sótanos, así como en la cimentación del edificio.

En este momento, han explicado los responsables, se están reconstruyendo los forjados y próximamente se procederá también a la instalación de una cubierta provisional para mantener protegido el interior del Palacio.

Uno de los hechos más significativos de las obras ha sido la detección de diversos restos arqueológicos de cierto interés. Se trata de los sótanos de una vivienda del siglo XV y los restos de un horno alfarero del siglo XIII, que fueron excavados completamente para su conocimiento y recuperación de materiales asociados