¿Cómo va a ser la cultura en los próximos meses? Una píldora. La vicealcaldesa y consejera municipal de Cultura y Proyección Exterior, Sara Fernández, ha señalado hoy que su área está trabajando en la redacción de protocolos de seguridad para los eventos culturales, que ha dejado claro que «no son eventos peligrosos». Así lo ha expresado tras la celebración de la sesión temática relativa a su área de la Comisión para el Futuro de Zaragoza, en la que grupos municipales y agentes sociales y vecinales tratan de acordar las medidas para paliar esta crisis.

La vicealcaldesa ha recalcado su compromiso con el mantenimiento de la programación cultural de la ciudad y en el apoyo a las compañías locales. En ese sentido, ha anunciado que el Teatro del Mercado programará exclusivamente artistas locales a lo largo de toda la temporada 2020-2021 -ya hay un compromiso con 16 compañías- y que se les dará también prioridad en el Teatro Principal, que volverá a la actividad en septiembre con el bailarín Miguel Ángel Berna y su espectáculo Jota, cuyo estreno estaba previsto inicialmente para el pasado 23 de abril.

Sara Fernández se ha comprometido asimismo a adoptar las medidas necesarias para volver a programar al aire libre, especialmente este verano, que le gustaría que contara con una programación cultural mayor que en años atrás.

La vicealcaldesa ha explicado que estudia también nuevas formas para recuperar el hábito de consumo cultural en la ciudad, porque «la cultura es un derecho y hace sociedad». Además, recalcó que el sector ha sido «especialmente generoso» y ahora ha llegado el momento de devolver esa generosidad consumiendo.

Fernández, además, ha indicado que no van a poner problemas a la reducción de todos los costes que tengan que ver con el ayuntamiento y el impulso a que Zaragoza sea un lugar de rodajes cinematográficos.

En el ámbito presupuestario, Fernández ha señalado que espera mantener los 16 millones de euros con los que cuenta su área, pero está a la espera de ver hasta dónde llega la caída de ingresos por falta de actividad y de cuánto dinero llega de otras instituciones.

La disminución de ingresos por el cierre de teatros o museos municipales repercute directamente en el área y los grupos de la oposición son conocedores «de primera mano» de esta situación, ha dicho en respuesta a las críticas lanzadas desde la izquierda, que están preocupadas porque la crisis acabe repercutiendo nuevamente en la actividad cultural de la capital aragonesa y en las compañías locales.

Por su parte, el responsable municipal de Participación y Relaciones con los Ciudadanos, Javier Rodrigo, ha apostado por que los centros cívicos trabajen coordinados con el Área de Cultura para dar una salida más a las compañías e impulsar la descentralización de la programación cultural. Ello supondría un desahogo para las compañías locales, acercaría la cultura a los barrios, evitaría desplazamientos y minimizaría la exposición de todos los zaragozanos al virus. De momento, todas las instalaciones municipales, incluidos los museos que pueden abrir se encuentran cerrados a la espera de que se cumplan todas las medidas de seguridad para los trabajadores y público.

Por otra parte, la Plataforma en defensa de las artes escénicas de Zaragoza, de reciente creación, ha convocado al resto de asociaciones a un encuentro virtual el martes para abordar la situación del sector e intentar definir una serie de medidas que solicitar a las instituciones para paliar los efectos de esta crisis del coronavirus.