Hacia la mitad del documental se establece un debate entre Carmen Alonso Colmenares, antigua novia del cantante, sobre cuándo y con quién probó el músico por primera vez la heroína. La adicción de Vega es uno de los ejes de la cinta, como lo fue de su vida. Por eso le ha extrañado tanto a la directora, Paloma Concejero, que la familia se haya sentido molesta por el tratamiento que le da a esta faceta de su vida. Su sorpresa fue mayúscula cuando Carlos Vega, hermano de Antonio, le comunicó a principios de año que se sentía traicionado. "Un mes antes había visto la cinta en un pase privado y acabamos abrazados. La familia ha sido testigo de estos cinco años de trabajo y han tenido siempre acceso a la obra, no hay traición posible", señala Concejero. Al parecer, en el entorno de Vega han molestado especialmente ciertas imágenes, como las de los poblados del extrarradio de Madrid donde se cuenta que iba a buscar droga.