Volcado en los últimos años en el cine, faceta en la que se ha consagrado como uno de los mejores actores españoles de los últimos tiempos, Eduard Fernández regresó a principios del pasado año a las tablas teatrales para interpretar Panorama desde el puente, una producción del Teatro Romea de Barcelona con la que se conmemoraba el centenario del nacimiento de su autor, Arthur Miller. Fernández, que hoy debería asistir a la gala de los Premios Feroz, estará sin embargo dando vida a Eddie Carbone en el Teatro Principal de Zaragoza, un escenario que no pisaba desde que en 2006 se metiese en la piel de Hamlet e interviniese en un pequeño papel en La Tempestad, en un memorable doblete en homenaje a Shakespeare.

El francés Georges Lavaudant es el encarfado de dirigir la pieza que consagró a Arthur Miller como dramaturgo, en un montaje que cuenta en su reparto con Jordi Martínez, Mercè Pons, Marina Salas, Bernat Quintana, Pep Ambròs, Rafa Cruz y Sergi Vallès, y que solo podrá verse en Zaragoza hoy (20 horas) y mañana (18.30). Eso sí, con el añadido de que al acabar la función de hoy sábado, a las 22.30 horas, habrá un Encuentro con el público, en el que los asistentes podrán cambiar impresiones con el equipo técnico de la obra.

Panorama desde el puente es una de las obras cumbres de Arthur Miller y de la literatura dramática contemporánea. Con ella ganó su segundo premio Plutzer tras el obtenido con Muerte de un viajante y está también rodeada de mitología ya que su estreno coincidio con su enemistad con Elia Kazan por la caza de brujas y con su romance que acabó en matrimonio con Marilyn Monroe.

TRAGEDIA

En esta obra, Miller puso su mirada en la dolorosa vida de los inmigrantes ilegales en Estados Unidos en las décadas de los 40 y 50, que habían llegado al país tras la Segunda Guerra Mundial, y también en la corrupción que dominaba los puertos en los que estos inmigrantes trataban de ganarse la vida.

La trama cuenta la historia de Eddie Carbone, un honrado trabajador de origen italiano, que vive obsesionado por la pasión devastadora que siente hacia su sobrina, a quién recogieron él y su esposa, tras quedarse huérfana. Una situación insostenible que le superará, le hará traicionar a su familia y romperá la ley del silencio establecida entre los trabajadores, mayoritariamente inmigrantes, del puerto de Nueva York. Una situación que acabará en tragedia.