Maga vuelve y estrena disco tras seis años. El indie sevillano vuelve a contar con uno de sus referentes después de un parón que ha servido al grupo para regresar con las cosas claras. Miguel Rivera, cantante, guitarrista y líder de la banda, estuvo en Zaragoza presentando su Salto horizontal con un acústico en Fnac de Plaza España, y el grupo, con David García a la batería y Javier Vega al bajo, comenzará una gira en Córdoba -17 de marzo- que les traerá a Zaragoza el 23 de abril, en Las Armas.

-¿Ha venido bien el parón?

-El parón nos ha llevado a volver a creer en lo que un grupo tiene que creer, las canciones. Anteriormente se nos había agotado el discurso de Maga, no teníamos nada que decir ya a los fans. Y en este tiempo estuvimos metidos en otros proyectos, en ningún momento dejamos la actividad musical, y pudimos llevar la vista a otros sitios.

-¿Cómo surge la reunión, y para sacar un disco tras seis años?

-De repente un día tenía unos cuatro bocetos de canciones que sonaban a Maga, y hablé con mis compañeros y les dije que tenía material para un posible disco nuevo. Eso sí, no podía ser cualquier cosa, si no, no lo hubiéramos sacado. Al final teníamos dieciocho bocetos, y fuimos recuperando la ilusión como al principio del grupo. Después de este tiempo eso no ha muerto por alguna razón, y en un año teníamos un disco en proceso.

-¿Por qué han decidido contar por primera vez con un productor externo para grabar?

-En el resultado ha tenido mucho que ver el productor, Ángel Luján. Queríamos una visión externa, que fuera exigente con el grupo y que sacara todo el jugo a Maga. Él ya ha trabajado con Xoel López, Vetusta Morla o Anni B Sweet, y aceptó este reto que le propusimos, pero con una condición. Nos dijo que Maga tenía cosas que la gente añora, como las bases electrónicas, las melodías más luminosas, cosas que se han ido diluyendo con el tiempo, y nos propuso recuperarlas, poniéndole un envoltorio contemporáneo, y nos preguntó si estábamos dispuestos a quitarnos los prejuicios.

-¿Piensan llevar al directo todo lo que se escucha en el disco? Por ejemplo, los arreglos de violines.

-La intención es hacer un directo lo más fiel posible al álbum. Si podemos, intentaremos que Johnny Montero, que grabó los violines, nos acompañe en los conciertos, pero si no César Díaz, que es el teclista, se tendrá que comer el marrón (risas). Ahora estamos ensayando y suena como en el disco. Tenemos intención de hacer gira, pasar por festivales, si se puede hacer una segunda vuelta de la gira y seguir componiendo.

-¿Qué es lo que hace al disco diferente y nostálgico?

-La premisa para este disco era quitarse los prejuicios, y por un lado hay muchos sintetizadores, percusión electrónica, ritmos bailongos, como a mí me gusta llamarlos. Al mismo tiempo que hacemos un puente con los primeros Maga, lo es también a sonidos más actuales. Por otro lado, el diseño del disco es obra de Francisco Lemos, ilustrador argentino, que tiene un imaginario con mucha vinculación con el nuestro, que ha hecho una ilustración por canción.

-¿Crees que hay que valorar más el trabajo artesanal en los discos?

-Sí, un disco también es lo que lo envuelve. Puede ser un pack aburrido o algo que te excite la fantasía, como el pez volador de la portada en este disco, algo que te traslade a un plano diferente de la realidad ya antes de ponerte a escucharlo.