El ciclo Grandes Solistas recibe esta noche (sala Mozart del Auditorio de Zaragoza, 20 horas) a la pianista venezolana Gabriela Montero que interpretará un programa con dos partes. En la primera, la artista interpretará a Schumann a través de Kinderszenen (Escenas de niños), Op. 15: Von fremden Ländern und Menschen (Sol), Kuriose Geschichte (Re), Hasche-Mann (Si m), Bittendes Kind (Re), Glückes genug (Re), Wichtige Begebenheit (La), Traümerei (Fa), Am Kamin (Fa), Ritter vom Steckenpferd (Do), Fast zu ernst (Sol sostenido m), Fürchtenmachen (Sol), Kind im Einschlummern (Mi m) y Der Dichter spricht (Sol); y a Chick Corea (Children’s songs). Ya en la segunda parte será el turno de la Sonata n.º 2 en Si m, Op. 61 de Shostakovich y de sus tradicionales improvisaciones sobre temas pedidos al público.

PREMIO GRAMMY / En los siglos XVIII y XIX era común que los pianistas crearan también sus propias obras, una tradición que la venezolana Gabriela Montero mantiene. De hecho, recibió el Grammy al mejor álbum latino en el 2015 por un disco que incluía varias improvisaciones y su creación Ex Patria (2011), donde denuncia la situación de Venezuela.

Lo grabó con la Young Orchestra of the Americas (YOA), dirigida por Carlos Miguel Prieto con quienes ha vuelto a colaborar en Concierto Latino, su última obra. «Penetro tanto en el aspecto festivo del alma latina como en sus corrientes más oscuras. Tiene un tono agridulce». El tercer movimiento, pese a llamarse Allegro venezolano, «termina con una danza macabra que refleja esa lucha entre la luz y la oscuridad».

La artista abandonó Venezuela hace ahora ocho años y actualmente reside en Barcelona, una ciudad en la que actúa habitualmente.

Nunca confió en las políticas de Chávez, menos aún, en las de Maduro y es algo que no tiene ningún problema en afirmar y en denunciar a la menor oportunidad. «Mi país vive una situación de crisis humanitaria. Las estadísticas están ahí. Vivimos una barbarie sin precedentes en América Latina. El régimen comunista y la narcomafia han colapsado Venezuela», sentencia con su habitual rotundidad.

CRÍTICA A DUDAMEL / También critica el apoyo del aclamado director Gustavo Dudamel a la Joven Orquesta Simón Bolívar, creada a partir de una estructura que forma a músicos sin recursos, El Sistema. «La dictadura utiliza esta estructura y a sus músicos para limpiar su imagen y ocultar la dramática situación». Como hiciera, por ejemplo, Pau Casals con los refugiados de la guerra civil, Gabriela Montero colabora con organizaciones diversas para ayudar a sus compatriotas.

Las entradas para este concierto cuestan 42 euros (plateas), 32 euros (anfiteatros), 22 euros (escenario) y 12 euros (coro) y se pueden adquirir en las propias taquillas del Auditorio de Zaragoza así como en la web y en los cajeros de Ibercaja.