Hace cuatro años formó parte de los 22 narradores en castellano menores de 35 años de la revista Granta (es una de las cuatro mujeres con la catalana Sonia Hernández y las argentinas Samanta Schweblin y Pola Oloixiarach). El protagonismo de la última novela de Elvira Navarro (Huelva, 1978) lo llevan dos mujeres que intentan sobrevivir en la precariedad de la crisis. En La trabajadora (Random House), que debe mucho a Persona de Bergman, Navarro establece un paralelismo entre el difícil equilibrio material del momento y un no menos complicado equilibrio mental. Dos mujeres una sana y otra desquiciada se enfrentan e intercambian sus papeles.