El Festival Internacional de las Culturas Pirineos Sur cambiará su modelo de gestión en la edición del 2019, la número XXVIII, ya que la Diputación Provincial de Huesca (DPH) ha decidido sacar a licitación pública la organización de los conciertos del Auditorio de Lanuza, incluyendo la comunicación, la instalación de las infraestructuras necesarias y la prestación del servicio de hostelería en el recinto por una cantidad de 199.818,14 euros.

La diputada delegada de Cultura, Berta Fernández, ya anunció al finalizar la pasada edición que la complejidad administrativa que acarreaba la nueva ley de contratos había puesto muy difícil sacar adelante el festival «por lo que habrá que buscar nuevas fórmulas», decía, anticipando así la externalización de los conciertos principales, que ahora se ha hecho efectiva.

«El año pasado el festival se salvó de casualidad, pues los plazos que marca la ley de contratación para las administraciones públicas nos ahogaron, y las últimas incorporaciones de artistas se presentaron apenas dos meses antes del inicio, por lo que vimos que era necesario cambiar si queríamos mantener el festival y en agosto nos pusimos a trabajar ya en un pliego para la gestión y la programación artística del Auditorio de Lanuza», explican fuentes de la diputación oscense, que tras publicar el anuncio previo el pasado 28 de noviembre, hizo lo propio con el pliego de condiciones el 13 de diciembre. El plazo para que las promotoras presenten sus ofertas concluye el 8 de enero del 2019.

MANTENER LA ESENCIA

Así, la parte que sale a concurso es únicamente la gestión del recinto de Lanuza, mientras que la diputación seguirá haciéndose cargo tanto de los conciertos y actividades escénicas de Sallent de Gállego (que son gratuitas) como del Mercado que se celebra en la misma localidad, «pues se trata de mantener la esencia del festival», apuntan desde la DPH. Sin embargo, matizan que el recorte presupuestario que tanto el área de Cultura como otras van a sufrir, «al tener la DPH que asumir nuevas competencias, como los bomberos», obligarán también a una reducción de los días «y seguramente no podrán hacerse los 17 que se hacían sino que quedarán en 10, para poder seguir, eso sí, manteniendo un programa intenso y de calidad».

En esta misma línea de mantener el espíritu que siempre ha caracterizado al festival de difundir la música y las culturas del mundo incluyendo nombres de prestigio se incluye en las cláusulas del pliego la obligación de «seguir la línea programática del festival de los últimos cinco años».

El pliego incluye también la obligatoriedad de contar con «cuatro artistas internacionales como cabeza de cartel, al menos cuatro noches, así como la presencia de, al menos, tres artistas aragoneses en la programación de grupos y Dj’s». Las fechas de los conciertos serán los días 12, 13, 19, 20, 26 y 27 de julio.

El adjudicatario, además de las noches obligatorias, podrá presentar propuestas de actuaciones complementarias que podrán desarrollarse antes y después de Pirineos Sur, y que quedarían fuera del festival a efectos de comunicación y difusión. En todos los casos, el adjudicatario percibirá la totalidad de los ingresos que se generen en el festival y las actuaciones complementarias.

Además, la empresa gestionará también el servicio de hostelería, según el contrato, que incluye una serie de condiciones especiales, como es la aplicación del principio de igualdad entre hombre y mujeres; o la disponibilidad de 10.000 vasos reciclables con la imagen del festival. También estará obligado al montaje de las estructuras efímeras, desde la carpa del escenario a la del bar, la de atención sanitaria, el vallado del recinto o asumir el gasto de agua y electricidad.

En cuanto a la publicidad, será la empresa adjudicataria la que deberá encargarse de ella, incorporando el logotipo de la DPH y la imagen del festival, si bien todo el beneficio obtenido del merchandising y patrocinios corresponderán al adjudicatario.