Hay libros que se transforman en fenómenos, que llegan a ser el libro que se ha de leer: son aquellos best-sellers que triunfan milagrosamente, que garantizan sustanciosos beneficios para quien lo publica y confiere prestigio a sus descubridores. La chica del tren ha sido uno de esos prodigios globales, y su éxito ha desencadenado la reacción prevista: desde su aparición, cada sello, grande o mediano, anhela poseer su chica del tren; más o menos lo que sucedió, hace ya unos años, tras publicarse El secreto, de Rhonda Byrne. Hoy como entonces, las editoriales han hecho lo imposible para presentar su alternativa, su candidata, y nosotros hemos recogido tres novelas con posibilidades de sucesión: En un bosque muy oscuro, de Ruth Ware (RBA); La pareja de al lado, de Shari Lapena, editado por Suma; y en Grijalbo, La chica de antes, de J. P.Delaney. Pero abordemos una cuestión previa: ¿cómo fabricar una chica del tren?

El éxito del libro de Paula Hawkins comienza con una costosa y muy bien dirigida campaña publicitaria; no todos lo entienden, pero la promoción se traduce en ventas. Y, segundo, en saber elegir el target lector, en definir un público que pueda identificarse con el personaje principal: en ese caso eran mujeres (el grupo más lector y más fiel) que valorasen tanto la vulnerabilidad emocional de la protagonista como su fortaleza interior para sobreponerse a una dinámica tóxica, a un conflicto de pareja, a dejar de ser una persona en peligro; una carcasa de misterio pretendía aglutinar una trama que personalmente nunca me sedujo o, seamos más precisos, solo en el final.

Las tres novelas elegidas mantienen este esquema, pero con resultados diferentes, con ambientaciones que van de la más pura urbanita -como en La chica de antes, título que recuerda en exceso a La chica del tren- hasta la excesiva semejanza con Agatha Christie de En un bosque muy oscuro, que se nos ofrece como una recreación de Diez negritos. Un detalle curioso: en estas dos obras, las casas singulares serán un destacado elemento en la trama y -honestamente lo declaro- no sé cómo valorar esta misteriosa duplicidad.

Y si La chica de antes será un éxito este 23 de abril por su calidad, buena dinámica y doble trama, el hecho de que sea un thriller convencional, dirigido a un público general más que a un exigente segmento, hace que nuestra recomendación de el libro que se ha de leer recaiga en La pareja de al lado: un thriller psicológico potente, nada sanguinario, muy visual y atractivo. Una novela que entusiasmará: fresca, dinámica, bien aparejada, cautivadora, con giros magníficos que, pese a tratar del secuestro de una criatura, no es agobiante: entenderéis, leyendo, que este es un recurso, que no hay peligro, que lo importante es la búsqueda, la revelación de los secretos, el poder responder a las dos grandes preguntas que son el núcleo del de-senlace: por un lado, el quién. Pero, sobre todo, el para qué.