El edificio de viviendas Glas Eraikuntza, ubicado en la calle Jaén del barrio bilbaíno de Ametzola, y que se inauguró hace dos semanas con la presencia del alcalde de Bilbao, Ibon Areso, entre otras autoridades, tiene sello aragonés. La construcción de este edificio es obra de los zaragozanos arquitectos Carlos Miret y Marta Miret y ha sido promovido en régimen de cooperativa por un grupo de vecinos y consta de 14 viviendas.

El edificio está situada en un entorno caracterizado por la regeneración urbanística, a un paso del área de Ametzola y junto a la línea de mercancías de Adif, en proceso de soterramiento por parte de Bilbao Ría 2000 y que se convertirá en un atractivo bulevar. El proyecto de construcción de este edificio nació por el deseo de un grupo de vecinos de este barrio de contar con una vivienda más amplia, motivo por el que encargaron un estudio de viabilidad a los arquitectos Marta y Carlos Miret.

La singular arquitectura de Glas Eraikuntza hace un guiño al Museo Guggenheim Bilbao y al arquitecto expresionista alemán Bruno Taut. Con estas referencias ha surgido este edificio, ejemplo de arquitectura vanguardista que sirve para rehabilitar el entorno y en cuya construcción se ha utilizado la más avanzada tecnología. Dispone en la azotea de la primera piscina existente en un edificio de viviendas colectivas de Bilbao.

Los arquitectos del proyecto cuentan en su trayectoria profesional con obras de relevancia nacional e internacional. Son autores del proyecto de avance de candidatura de la Expo 2008, son ganadores y finalistas de mobiliario para la empresa Amat, cuentan con un diseño seleccionado por el SIDI en la feria de Berlín y su obra está referenciada en libros editados por el japonés Arata Isozaki.