El Instituto Cervantes de Burdeos inauguró ayer, con la colaboración del Ayuntamiento de Zaragoza, la exposición Goya Physionomiste, una muestra de obras del pintor de Fuendetodos que puede verse en el Museo de Bellas Artes de Burdeos. Con ella, se quiere presentar las relaciones de los rostros goyescos con los tratados de fisionomía de la época en los que se hace un paralelismo con animales que ya eran populares en el siglo XVI.

Goya en su obra gráfica, pero también en su pintura de invención, construye unos rostros muy alejados del inexpresivo semblante de los cortesanos cuya máscara es el disimulo. El rostro goyesco habla sin tapujos y directamente con el pueblo, que es el principal destinatario del mensaje de sus estampas. En torno a la misma giran otra serie de actividades como conferencias, visitas guiadas,...

La inauguración estuvo presidida por la directora del Museo de Bellas Artes de Burdeos, Sophie Barthélémy; el concejal de Cultura del Ayuntamiento de Burdeos, Olivier Doxaran; la directora del Instituto Cervantes de Burdeos, Luisa Castro, así como la Jefa de la Oficina de Relaciones Internacionales del Ayuntamiento de Zaragoza, Jara Polo.